Su última publicación en redes sociales fue una carta donde seí±alaba que âsu muerte no era una confesión de culpabilidadâ
Por: AgenciasÂ
Tras ser acusado por acoso sexual contra una menor de edad, Armando Vega Gil, exbajista de la extinta banda Botellita de Jerez, se quitó la vida en su casa ubicada en la colonia Narvarte.
Su última publicación en redes sociales fue una carta donde seí±alaba que âsu muerte no era una confesión de culpabilidadâ, sino una consecuencia del impacto económico que tendría las seí±alaciones en su vida y en la de su hijo.
âEn fin, es un hecho que perderé mis trabajos, pues todos ellos se construyen sobre mi credibilidad pública. Mi vida está detenida, no hay salida. Sé que en redes no tengo manera de abogar por mí, cualquier cosa que diga será usada en mi contra⦠Solo quiero dejar limpio el camino que transite mi hijo en el futuroâ, mencionó en la carta póstuma.â
El fallecimiento del músico definitivamente es lamentable, sin embargo, en redes sociales fue utilizado para âdesvirtuarâ el movimiento #MeToo, donde ahora han aparecido dos nuevas acusaciones contra el músico de 63 aí±os.
Una de ellas relata que Vega Gil le âtiró los perrosâ en una fiesta cuando apenas tenía 14 aí±os.
âClaro, no ayer, tiene más de 30 aí±os, y por supuesto, en ese momento yo quizá no conocía si quiera el concepto, el era un âfamosoâ tirándome el perro en una fiesta, y yo una adolescente de no más de 14 aí±os, quizá 13.
Mi mamá llegó y lo alejó porque ella sí era consciente de que yo tenía 14 aí±os y él al menos el dobleâ.
Otra chica apoyó la denuncia y contó que había pasado por una situación similar.
Armando Vega Gil me escribió por Myspace cuando yo tenia 14-15 aí±os para decirme que qué bonitas piernas tenía y que cuando me dejaba mordérmelasâ.
Otra de las acusaciones más sonadas del movimiento #MeToo, es la de Efrén Barón, integrante de la banda División Minúscula, quien fue denunciado por al menos nueve mujeres por acoso sexual.
De acuerdo con la mayoría de las denuncias, una práctica recurrente del músico era enviar fotografías y videos de contenido sexual a mujeres que no habían dado su consentimiento para recibirlas.
Ante las múltiples denuncias, División Minúscula lo separó del grupo, sin embargo, él no ha aceptado su culpabilidad.
