Blanco ha dicho en respuesta que en el contrato su firma fue falsificada, por lo que denunció penalmente a los hermanos Yáí±ez
Por: Agencias
Cuernavaca, Mor.- Las dirigencias estatal y municipal del PRI solicitaron que el edil Cuauhtémoc Blanco se separe del cargo, para que enfrente las investigaciones en su contra por el contrato de 7 millones de pesos, que firmó para aceptar ser candidato del PSD a la Alcaldía de Cuernavaca.
En conferencia de prensa, Rodolfo Becerril, presidente estatal del PRI, e Iván Saucedo, dirigente municipal, criticaron que Blanco haga uso de los recursos del Ayuntamiento para su defensa jurídica personal.
âCuauhtémoc Blanco no puede disponer de los recursos humanos, materiales y financieros del Ayuntamiento de Cuernavaca para su defensa jurídica, ni distraer el tiempo que debe dedicarle a su trabajo como Presidente Municipal para la atención de sus problemas legales y personales.
âEventualmente, puede ser conveniente que Cuauhtémoc Blanco Bravo se separe del cargo con el objeto de hacer frente a las imputaciones legales en su contra, salvaguardando la imagen de la institución que hoy representa y que sus continuas ausencias no afecten la marcha de la Administración pública municipalâ, expresó Saucedo.
Los hermanos Julio y Roberto Yáí±ez, el primero diputado local por el PSD y el segundo ex Secretario General del Ayuntamiento, exhibieron un contrato mediante el cual pagaron 7 millones de pesos a Cuauhtémoc Blanco para que accediera a ser candidato de ese partido.
Blanco ha dicho en respuesta que en el contrato su firma fue falsificada, por lo que denunció penalmente a los hermanos Yáí±ez.
El PRI en Morelos adelantó que procederá legalmente en contra del edil y criticó la ola de escándalos en la que continuamente se ha visto envuelto desde que asumió el cargo.
âAl inicio de esta Administración municipal fueron los hermanos Yáí±ez quienes manejaron el Ayuntamiento a su antojo, a ciencia y paciencia de Cuauhtémoc Blanco que, aún al día de hoy, desconoce las responsabilidades que implica ser Presidente Municipal y lo que es peor aún, un alcalde cuyo tiempo se destina a la atención de sus compromisos deportivos, como su próximo viaje a Roma, o a la atención de sus asuntos legales y personales, pero poco, muy poco a lo que debería ser su prioridad: la atención de la grave problemática municipal.