Saltillo, Coah.- La Secretaría del Trabajo en Coahuila pedirá a las empresas que podrían resultar afectadas por la huelga de la industria automotriz en Estados Unidos, agotar primero otras instancias como el mantenimiento, capacitación o vacaciones, en vez de irse a paro técnico.
Nazira Zogby Castro, titular de la SETRA, dijo que se desconoce el impacto que causará en las empresas de Coahuila, la huelga en el país vecino, por lo que, están sondeando a las empresas para saber cuál es su estatus y como resolverán en caso de resultar afectadas.
“Estamos levantando una encuesta, la cual ya hicimos aquí en la región sureste, para diagnosticar cual sería el impacto y las acciones de prevención y acciones de contingencia que se tendrían que implementar en el caso de que llegar a impactar la huelga en Estados Unidos”, indicó Zogby Castro.
Sin embargo, destacó que el que todavía no haya afectación, no quiere decir que no la vaya a haber, por lo que dependiendo del resultado de la encuesta y lo que sucede en próximos días o semanas, buscará convencer a las empresas de Coahuila, para evitar irse a paro técnico.
“Y en el caso de que ya hubiera impacto, agotar primero todas las instancias que tienen que ver con mantenimiento, capacitación, vacaciones pendientes. Hay una serie de acciones a tener un paro técnico”, indicó la Secretaria del Trabajo.
Dio a conocer que, hasta el momento, según el diagnóstico de la encuesta ya realizada en más de 48 empresas automotrices de la región sureste, les arroja que hasta ahora no se ha visto vulnerado ni afectado la productividad.
Y aunque todavía no se aplica al resto de las empresas en el estado, lo que se sabe es que a la fecha ninguna empresa en Coahuila ha parado su producción debido a la falta de proveeduría de origen norteamericano, o que se hayan cancelado contratos o cargamentos a proveedores locales que exporten a la industria automotriz del vecino país.
Peligra desarrollo del nearshoring
El fenómeno del nearshoring en el país también podría verse retrasado por la huelga del sindicato de trabajadores de las tres mayores automotrices de Estados Unidos, la UAW.
“Es probable que inversiones que ya están preparadas sean retrasadas, provocando una pausa en la construcción de más infraestructura para las empresas automotrices que buscan llegar a México”, indicó Víctor Soulé, socio líder de Manufactura Avanzada y Movilidad en EY Latinoamérica. “Un contrapunto positivo es que, si suben los salarios en EU, también contribuye a generar más ingresos”, indicó Francisco Bautista, socio de EY Latinoamérica.
Esto podría ser beneficioso en el caso de México, porque los productores buscarían lugares donde pudieran hacer la manufactura a precios más bajos que en Estados Unidos, trasladando aún en mayor medida sus operaciones a nuestro país. El diagnóstico de la posible afectación a las empresas de la Región Sureste de Coahuila ya se efectuó en por lo menos 48 empresas del sector automotriz y hasta el momento no se han visto vulneradas.
Opción inviable
El rol de México como productor debe ponerse en perspectiva, ya que no es una opción viable reemplazar la producción de Estados Unidos con las plantas en nuestro país, consideró Víctor Soulé, socio líder de Manufactura Avanzada y Movilidad en EY Latinoamérica.
Esto debido a que Estados Unidos tiene una capacidad productiva de aproximadamente 18 a 20 millones de automóviles anuales, mientras que la capacidad instalada de México es de aproximadamente 4 millones de automóviles.
AFPR
