
Irene Azuela, manifestó su sentir en torno a esta producción, que estelarizó junto a Osvaldo Benavides, Juan Manuel Bernal y Rosa María Bianchi
Por: AgenciasCiudad de México.- Con Salma Hayek volvería a trabajar con los ojos cerrados y con Lemon Films toda la vida luego de la grata experiencia que representó Monarca para Irene Azuela, quien quedó inconforme con el final âviolentoâ que tuvo la serie de Netflix.
âQueríamos más, claro, queríamos sobre todo cerrar la historia y ver cuál era el desenlace final de estos personajes que quisimos tantoâ, expresó Irene, quien dio vida a Ana María Carranza en la serie.
La actriz llegó el viernes al Palacio de Hierro en San Pedro, Nuevo León, para unirse a la celebración de los 100 aí±os de la fragancia de Chanel No 5. Ahí manifestó su sentir en torno a esta producción, que estelarizó junto a Osvaldo Benavides, Juan Manuel Bernal y Rosa María Bianchi.
âEl público también se merecía un final, un terminar la relación que empezaste con los personajes, porque eso es muy bonito. Una de las virtudes que tenemos con las series, con las distintas temporadas que te pueden ofrecer, es la relación que haces entre el público y la historia o los personajesâ.
Por eso no dudó en decir que la manera de concluirla fue desmesurada.
âEsto fue como quedarnos a medias, como una cosa bastante violenta, ¿no?â, declaró, Irene quien confesó que echa de menos a Ana María, su personaje.
âLa gente que nos siguió estaba muy triste, decepcionada, enojada, y lo expresaba en las redes. A mí me escribían mucho y me paraban en las calles y me decían: â¿Qué onda?, ¡qué decepción!ââ.
La actriz, quien acaba de concluir las grabaciones de una nueva serie, Los Enviados, para Paramount Plus, de igual manera está muy agradecida por lo que representó ese trabajo.
âMe dejó muchas cosas, la verdad es que fui creciendo con el personaje porque durante dos temporadas fui entendiendo muchas cosas que al principio no, pero, sobre todo, me dejó una satisfacción enorme por haber colaborado con un equipo increíbleâ.
Hizo hincapié en el trabajo del director Fernando Rovzar, quien logró hacer del equipo âun barco integradoâ.
âTodas las piezas estaban muy bien ancladas, entendidas, y eso se sentía todos los días en el set. Y la verdad que tener un set así de amable, amoroso y divertido, en donde la disciplina es vital, pues no se encuentra en todas las produccionesâ.