El amor por su padre hizo que se desprendiera de sus propios deseos.
Por:Â Rosalío González
Saltillo, Coahuila.- Juanita vive con su mamá Coco y su papá Salomón en una de las partes más altas de la colonia La Minita, casi encaramada sobre el cerro de Las Galeras.
La vida modesta en la que viven y la urgencia de que el cuerpo de su padre recupere pronto todas sus facultades, obligan a Juanita, de 13 aí±os y estudiante con buenas calificaciones en la secundaria Otilio González, a pedirle a Santa Claus que adelante su regalo de Navidad para darle una nueva oportunidad a su papá.
âMi papá padece muchas cosas: no ve bien, necesita lentes que no podemos pagar y sus rií±ones no le funcionan bien; necesita la ayuda de un médico, pero no tenemos seguroâ, dice Juanita.
El amor por su padre hizo que Juanita se desprendiera de sus propios deseos. âNo quiero nada para mí, sólo que ayuden a mi papá; si él está bien, nada me faltaráâ.
Salomón Velázquez tiene 60 aí±os y desde hace ocho presenta severos problemas renales que la familia no puede costear. âNo tenemos seguro, tenemos que ir al Hospital Universitario y a veces son hasta mil pesos lo que tenemos que pagar cuando se pone maloâ, comenta Socorro Morales, mamá de Juanita.
La familia se dedica al comercio. Atienden una tienda de abarrotes cuyo dueí±o les da 10% de lo que venden al día. âA veces no sacamos ni 100 pesos al día para comprar comidaâ, dice Juanita, quien está muy consciente de la situación.
La ropa de Coco delata las carencias: viste un pantalón roto y don Salomón usa playeras de propaganda política que le regalaron a cambio de su voto, cuando les prometieron âsacarlos de la pobrezaâ.
