La directora del preescolar Amalia Ramos en Parras de la Fuente, aseguró que se trató de un accidente.
Por: Yadira Leos
Parras.-Â Tras la denuncia de una madre de familia que encontró a su hijo con severas lesiones llorando en el baí±o de un jardín de nií±os, la directora del preescolar Amalia Ramos en Parras de la Fuente, aseguró que se trató de un accidente.
Por âprotocoloâ la directora Veronica Carrillo Ramos omitió buscar ayuda médica para el menor cuyas fotografías muestran desprendimiento de parte del rostro y piezas dentales, y se limitó a reportar lo ocurrido a sus superiores escolares y aunque aseguró que se había comunicado a emergencias, omitió responder qué institución proporcionó la ayuda médica de urgencia.
Apenas ayer las autoridades educativas, al igual que el Ministerio Público iniciaron las investigaciones sobre lo ocurrido el martes a las diez de la maí±ana cuando Ana Patricia Bernal Alvarado acudió al preescolar para llevarle el lonche a su hijo y lo encontró en el baí±o ensangrentado y con el rostro desfigurado.
Con tres dientes caídos, uno más fracturado, el paladar suelto y una herida de aproximadamente cinco centímetros sobre el labio, permanecía el menor resguardado en el baí±o, sin que la directora hiciera algo para detener el sangrado. La maestra Verónica Carrillo le aseguró que había sufrido un accidente al caer de un resbaladero.
Al ver a las condiciones de su hijo, la madre lo recogió para trasladarlo a una unidad médica, lo llevó a Salubridad para atenderlo con el Seguro Popular. Ana Patricia reclama a las autoridades educativas el por qué no le avisaron del incidente y, denuncia ante Zócalo Saltillo el contubernio entre las autoridades para esconder lo sucedido a su hijo.
Inconforme con la explicación y por la gravedad de las heridas que presentaba Ana Patricia Bernal acudió al Ministerio Público de Parras para interponer una denuncia y se investigaran los hechos. Sin embargo, en la dependencia le dijeron que no podían atenderla porque no fue un delito y le explicaron que lo sucedido era calificado como un accidente escolar.
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