Saltillo, Coah.- El expresidente de Estados Unidos y precandidato republicano Donald Trump estuvo ayer frente a Coahuila, para atacar la gestión del actual Mandatario, Joe Biden, y denunciar una “invasión” de migrantes al país.
Trump se pronunció desde Eagle Pass, a unos pasos Del Río Bravo, que se ha convertido en un símbolo del enfrentamiento de las autoridades locales republicanas con el Gobierno federal a cuenta de la cuestión migratoria. Desde la alambrada de púas extendió su brazo para “saludar” a decenas de migrantes en terreno de Piedras Negras, quienes anhelan cruzar a la Unión Americana.
Por otro lado, el secretario de Gobierno de Coahuila, indicó que el flujo migratorio por el estado ha caído más del 90% desde finales de 2023.
El presidente Joe Biden y el expresidente Donald Trump, por separado, visitan este jueves la frontera de Texas con México para avanzar sus campañas a la elección de noviembre culpándose mutuamente por no resolver los problemas de la emergencia migratoria, mientras que Trump, elogió además las acciones impulsadas por el gobernador Greg Abbott para contener a los migrantes en la frontera entre Coahuila y Texas.
Durante su arribo a la ciudad de Eagle Pass, el exmandatario ingresó a las instalaciones del Shelby Park por un área al sur del campo de golf; bajó a un costado del Puente Internacional 1, y junto al Gobernador texano se dirigió a los ciudadanos.
Trump amagó que de ganar la Presidencia exigiría que México instalara a 28 mil soldados para evitar el flujo migratorio, además de implementar reformas migratorias más efectivas y planes para llevar a cabo deportaciones masivas, con millones de dólares inyectados a las fronteras para combatir la migración ilegal.
En contraste, el mandatario estadunidense Joe Biden se reunió con miembros de la Patrulla Fronteriza y las autoridades y líderes locales en Brownsville, donde exhortó a los republicanos a aprobar el proyecto bicameral para asignar recursos a la vigilancia en la frontera.
“México hará lo que nosotros le digamos”. Con esas palabras, el presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Mike Johnson, habló ayer sobre el tema migratorio, donde insistió en que los republicanos exigen resolver a cambio de aprobar un presupuesto definitivo en EU con el Gobierno demócrata.
Simpatizantes no logran ver a Trump
Pese a que invitó a cientos a que lo vieran en Eagle Pass, Donald Trump desairó a cientos de simpatizantes que le esperaban para verlo a lo largo de la calle Main en Eagle Pass, uno de los accesos que dirige al Shelby Park, donde ofreció su conferencia junto al gobernador Greg Abbot.
Y es que a su arribo a la frontera de Del Río vía área, se trasladó por carretera a Eagle Pass, pero aunque tomó las principales calles de la ciudad, decidió seguir de largo hasta el loop 480 y entrar bajo el Puente Internacional 2, y posteriormente entrar por el campo de golf a lado de los contenedores hasta donde ofreció su conferencia.
Karen Gonzalez, miembro de una Organización Fronteriza, quien junto a varios residentes locales y de Del Rio se manifestó contra las visitas de ambos personajes políticos ayer, reiteró que la visita de Donald Trump a Eagle Pass, así como la de Joe Biden a Brownsville, “no sirven de nada” a los texanos, pues solamente les favorece a ellos porque ambos están utilizando el tema de la inmigración para promoverse y ganar sus propios votos rumbo a noviembre.
‘Texas se defenderá legalmente de invasión’
A la par del evento con el expresidente y el Gobernador texano, un juez estadunidense aplazó ayer la entrada en vigor de la Ley SB4 de Texas, que a partir del lunes permitiría a las autoridades de ese estado detener a los migrantes, encarcelarlos o expulsarlos, situación que provocó la reacción de Greg Abbott.
“Juez bloquea ley de Texas que nos permite arrestar y deportar inmigrantes. No me preocupé, esto era lo que se esperaba. El juez de primera instancia dijo desde el tribunal que este caso será decidido por la Suprema Corte. Estoy de acuerdo. Texas tiene bases legales sólidas para defenderse de una invasión”, insistió Abbott.
Asimismo, activistas y migrantes de la frontera norte de México expresaron su alivio, aunque persiste la preocupación por esta ley, pues temen abusos de las autoridades de Texas e, incluso, que detengan a personas que ya viven en Estados Unidos sólo por su apariencia, situación que también causa alerta con la propuesta de ley en Arizona, que buscaría legalizar el asesinato de migrantes por traspaso ilegal de propiedad.
“Es una cacería completa, sería algo muy descontrolado el hecho de que por tu simple apariencia latina o hispana un policía te pueda parar, además que conlleva otras cosas, como la separación de muchas familias en las zonas fronterizas”, agregó la activista Rosa Mani Arias, coordinadora del área de Servicio al Migrante de la organización civil Abara de Juárez-El Paso.
Con información de: Eleazar Ibarra, EFE y El Universal
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