Saltillo, Coah.- En autobús, en coches particulares, simulando ser turistas o personas migrantes, es como los delincuentes ingresan al estado, así lo revelan las labores de inteligencia que realiza personal de la Fiscalía General del Estado, tras las últimas detenciones de personas que han cometido asaltos, robos y homicidios en Saltillo.
También Coahuila es un atractivo para aquellos delincuentes que buscan esconderse de las autoridades tras cometer delitos en otras entidades e incluso en los Estados Unidos.
Los criminales buscan rendijas o huecos en la seguridad del estado, así lo refiere el fiscal general del Estado, Gerardo Márquez Guevara, por eso la importancia de mantener el blindaje en Coahuila, para evitar que sigan llegando criminales a la entidad.
“El tema es que se buscan rendijas, las personas que se dedican a la delincuencia buscan rendijas; hemos detectado, no ahora, pero en otros tiempos, que en los camiones de pasajeros viene gente que busca asentarse para buscar tiendas, instituciones bancarias, malls”.
El fiscal señaló que tras las detenciones que se han realizado en Coahuila detectaron un modo particular de operar de los delincuentes: utilizan medios de transporte comunes para ingresar a la entidad; se hospedan en algún hotel, mientras fraguan un plan para cometer el crimen; estudian los movimientos de las personas que se convierten en sus víctimas.
El fiscal del Estado, Gerardo Márquez Guevara, explicó que el modo de operar de la delincuencia denominado “hormiga” lo han detectado gracias a las labores de inteligencia que realiza el personal de la Agencia de Investigación Criminal, en coordinación con las autoridades estatales y municipales.
“No los hemos detectado en el trayecto del camión, pero cuando ya hacemos la investigación nos damos cuenta de que así ocurre, en taxis o en vehículos particulares”.
En lo que va del año se han registrado en Saltillo sucesos de inseguridad protagonizados por delincuentes que vienen de otras entidades, como el asalto que cometieron los integrantes de la “Banda del Mazo” en la sucursal de BBVA Bancomer, ubicada sobre el periférico Luis Echeverría Álvarez.
El hecho ocurrió el 22 de junio, cuando los ladrones irrumpieron en una sucursal bancaria y quebraron los vidrios de la caja con un mazo, para exigir a los cajeros que les entregaran el efectivo que tenían disponible.
De acuerdo con la investigación de las autoridades, los integrantes de esta banda criminal llegaron a Saltillo días antes del atraco y se hospedaron en un hotel de la ciudad.
Durante días fraguaron su plan de robo para identificar los movimientos en las sucursales bancarias; los delincuentes llegaron a Saltillo en automóviles particulares, sin levantar sospechas.
En agosto se presentó otro hecho delictivo en el que estuvieron involucrados delincuentes que venían de otras entidades, incluso dos personas eran de nacionalidad colombiana.
Fue el 4 de agosto que un grupo integrado por seis hombres asaltó a un hombre en la zona norte de la ciudad y lo despojó del dinero que se utilizaría para pagar la nómina de una empresa.
Los delincuentes habrían arribado a Saltillo en automóviles que rentaron en el aeropuerto de Monterrey, simulando ser turistas, y durante días estuvieron estudiando los movimientos de su víctima.
Los casos más recientes fueron el de un asalto a una tienda de billetes de lotería, donde tres sujetos de origen tamaulipeco ingresaron a un negocio ubicado en la colonia Buenos Aires y dispararon contra la propietaria de la tienda, para despojarla de una cantidad de dinero.
De acuerdo con el fiscal general del Estado, los asaltantes llegaron a Saltillo a bordo de automóviles particulares, en los que durante varios días estuvieron rondando las colonias del sur de la ciudad.
El último atraco cometido por delincuentes originarios de otros estados, sucedió la noche del 2 de noviembre, cuando dos hombres originarios de la Ciudad de México irrumpieron en el restaurante El Feligrez y asaltaron a los comensales.
Todos los delincuentes han sido detenidos, por lo que en Coahuila acabó su racha delictiva, y actualmente se encuentran vinculados a procesos penales por los delitos de robo u homicidio, de acuerdo con los casos que correspondan.
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