Por Teresa Quiroz
Saltillo.- Y del cemento crecieron flores llenas de espinas para defender sus vidas, con aroma aerosol y sed de justicia; flores con nombre de mujeres que salieron a las calles de Saltillo para exigir un alto a la erradicación de la violencia de genero.
Desde Avenida Universidad al norte de Saltillo, hasta la plaza Nueva Tlaxcala en el centro de la ciudad las calles se pintaron de violeta. Decenas de mujeres salieron con sus hijas a marchar respaldando el paso de las madres que tuvieron que asistir solas, porque a sus hijas las mataron.
Tal fue el caso de Roció Almanza, madre de Evelyn niña de 16 años asesinada en Saltillo, quien acompañada de las amigas de su hija, tías y hermanas participó en el contingente principal, el de víctimas.
– ¿Es la primera vez que marcha? – se le cuestiono a la mujer que sin pensarlo respondió contundente.
“Es la primera vez que me matan a una hija”
En ese contingente también estuvieron presentes la madre de Olga, familiares de Marlene, de Alondra y de las decenas de mujeres que han perdido la vida a manos de un hombre, pero que ganaron voz con la garganta de las miles de mujeres que gritaron sus nombres al arranque de la marcha.
El paso fue lento pero firme, poco a poco el bulevar Venustiano Carranza en su carril de norte a sur fue llenándose de mujeres y del aerosol que sirvió para comenzar con las intervenciones de protesta que quedaron plasmadas en edificios como la Iglesia de Fátima y las paredes del túnel vehicular que conecta con la zona centro de Saltillo,
“La policía no me cuida, me cuidan mis amigas”, “Gobierno opresor”, “Estado feminicida” y “ Ni una más” fueron las principales pintas que empezaron a tapizar la ciudad.
La euforia, la sororidad, el sentimiento de rabia y lucha se hicieron presentes en cada paso, en el andar de cada mujer que participó y que terminó desbordándose en contra del edificio del cine Olimpia; emblemático lugar famoso por la reproducción de películas con contenido para adultos.
“Sin consumidores no hay trata”, “pinches cerdos”, entre otras consignas fueron las que quedaron marcadas en el edificio al que también con el uso de martillos le quebraron los cristales, todo ante la mirada atónita del encargado del lugar quien no tuvo más remedio que cerrar las puertas para evitar algún tipo de confrontación.
Y aunque la mayor parte del trayecto por la calle de Allende transcurrió de manera tranquila, las integrantes del bloque negro se encargaron de manifestar con acciones el enojo de las mujeres, continuando con la realización de pintas, impidiendo que quedara registro de quienes participaban en el acto y alejando a los hombres que por curiosidad, cuestiones laborales o solidaridad grababan el paso de la ola violeta.
Al paso de una hora y media las primeras mujeres arribaron a la plaza Nueva Tlaxcala, a espaldas del Palacio de Gobierno, donde el micrófono ya las esperaba y la hoguera puesta para quemar a sus agresores ya ardía.
Pronto las participantes fueron tomando la voz y exigieron justica por las que ya no están, justicia para las que vienen y mejores condiciones de vida para quienes continúan en el camino.
Recordaron que la lucha feminista es por todas incluso por las que no participaron en la que consideraron una de las manifestaciones con mayor participación de mujeres en los últimos tiempos.
En el lugar la emoción, el cansancio y los rayos del sol provocaron que una de las manifestantes se desvaneciera mientras participaba en uno de los pronunciamientos que desde el foro se emitía; al lugar arribaron elementos del servicio medico de la Secretaría de Salud con la finalidad de prestar los primeros auxilios.
El cumulo de mujeres no solo alcanzó para abarrotar la plaza sino que también llenó la calle de Allende entre Juárez y Pérez Treviño, donde el humo violeta, los aerosoles y las consignas fueron apagándose lentamente.
Al termino de la jornada la Comisaría de Seguridad y Protección ciudadana reporto cero detenciones y una serie de daños a la vía publica y propiedad privada que las cuadrillas de Servicios Públicos estarán valorando y tratando de resarcir los daños.
Federico Fernández Montañez, titular de la dependencia municipal, instó a los comerciantes agraviados a interponer las denuncias pertinentes para que la autoridad pueda proceder con la investigación de los hechos, luego de aclarar que las autoridades no procedieron a la detención de nadie por considerar que la naturaleza de la marcha obedecía a solo salvaguardar la integridad de las participantes.
