Los Rojinegros, con la victoria en el Clásico, están en la cima de la general, bajando al América, que juega hoy
Por: AgenciasGuadalajara.- Después de mil 260 días, Atlas volvió a ganar el Clásico Tapatío ante unas Chivas con nueve hombres que opusieron resistencia hasta el final.
Al ganar 1-0 en el estadio Akron, los Rojinegros le pusieron fin a una racha de seis torneos con derrotas, en un juego envuelto por la polémica, la intensidad, los ánimos candentes y la pasión que desata el derby de Guadalajara.
El partido comenzó a tomar el tinte rojinegro con la primera expulsión de la noche.
Atlas entrenó en la semana cómo jugar con superioridad numérica para que no volvieran a desaprovechar esa condición como en anteriores partidos y ante el Guadalajara se volvió a presentar ese escenario.
Tarjeta roja para Hiram Mier por una patada en la cara de Julio Furch apenas al 14â.
Minutos después, las malas condiciones de la cancha fueron factor en el penal que se le cobró a Luis Olivas sobre Julián Quií±ones.
Aldo Rocha tomó el balón y se sacó la espina del penal fallado en el partido anterior. Con frialdad cobró a lo âPanenkaâ y desató los efusivos y airados festejos frente a la barra de Chivas, al 26â.
En la celebración, el capitán rojiblanco Jesús Molina perdió la cabeza y comenzó un conato de bronca que terminó por sepultar las aspiraciones de su equipo. Cristian Calderón, quien enfrentaba por primera vez a su exequipo en el Clásico, empujó el rostro de Quií±ones y vio la segunda amarilla que dejó a las Chivas con nueve futbolistas en el terreno de juego.
Con el marcador a favor y la superioridad numérica, Atlas comenzó a ser amo y seí±or del partido ante unas valientes Chivas que disputaban los balones divididos con ímpetu y que buscaban el milagro en contragolpes.
Raúl Gudií±o volvió a ponerse la capa de héroe y le dio esperanza a su equipo con una atajada a un remate de Julio Furch y en un achique a Jesús Angulo, que tuvo para liquidar el encuentro.
El ánimo decaído de la afición local revivió gracias a su portero y un tiro libre de Alexis Vega que desvió Camilo Vargas los hizo creer que era posible.
La superioridad numérica no era evidente en el juego, ni en el marcador. Atlas no logró ampliar la diferencia, sin embargo terminó por sentenciar el esperado triunfo para su afición.
Los Zorros se quedaron con el orgullo de ganar el Clásico Tapatío, el Rebaí±o se quedó con el orgullo de responder, ante la adversidad y resistir.
Con el triunfo, Atlas llega a los 22 puntos y dormirá en la cima general. Chivas se mantiene en la medianía de la tabla con 10.
