
Desde el 28 de abril, las manifestaciones contra el presidente Iván Duque se tornaron en revueltas en la urbe
Por: AFPCali, Colombia.- Las noches se volvieron pesadilla en Cali. La violencia de las protestas contra el gobierno colombiano estalló en esta ciudad donde convergen los males de un país sumido en seis décadas de guerra.
En la llamada âcapital del posconflictoâ, el acuerdo de paz firmado con la guerrilla FARC en 2016 no trajo la calma esperada.
Desde que comenzaron el 28 de abril, las manifestaciones contra el presidente Iván Duque se tornaron en revueltas en la urbe, duramente reprimidas por la fuerza pública, y la situación empeoró cuando cayó el sol el 3 de mayo.
La AFP recabó tres testimonios de las escenas de terror que sacudieron la capital del Valle del Cauca, con 2.2 millones de habitantes, y el municipio aledaí±o de Palmira.
Las revueltas dejaron 32 muertos en Cali, âsiete relacionados con las marchasâ, según la alcaldía.
La ciudad ha recibido una migración campesina y pobre en medio del conflicto armado, que no logró integrar del todo y eso provoca âdemasiada desigualdadâ, describe a la AFP Edgar Barrios, rector de la Universidad del Valle.
La situación se agravó por la crisis económica desatada por la pandemia, que afectó la industria, el comercio y la agricultura de esta ciudad del suroeste del país, donde la violencia repunta tras el acuerdo de paz.
En Cali se juntaron descontento social, pobreza, âeconomía ilegal de narcotráficoâ y âdistintas formas de criminalidadâ que se arraigan en barrios deprimidos, aí±ade el académico.
A los bloqueos de vías, que provocan desabastecimiento de gasolina y medicamentos en plena pandemia, el gobierno respondió con la militarización de la ciudad.
Muerto a bala
Kevin Agudelo, de 22 aí±os, asistió el lunes a una protesta con velas en Siloé, un barrio marginal de Cali.
Su madre recuerda que le prometió no acercarse al âalborotoâ.