En la mitología mexica, se creía que los xoloitzcuintles acompaí±aban a las almas de los difuntos cuando viajaban al Mictlán
Omeyocan
Era el lugar donde habitaba el sol, el cual se consideraba un guerrero que liberaba cada día una batalla, para los mexicas, perder la vida en la guerra era la mejor forma de morir y éste era su cielo.
A este lugar también iban las mujeres muertas en parto,a los cuatro aí±os de haber muerto se convertían o reencarnan en inmortales aves y se alimentaban con el néctar de las flores en los jardines del Tonatiuhichan (Casa del Sol), además que podían descender a la tierra.
Tlalocan
el paraíso de Tláloc;, el dios de la lluvia, es un lugar, lleno de alegrías, sin penas, en donde nunca faltaban las mazorcas de maíz, las calabazas, chiles verdes, jitomates, frijoles y flores, lleno de vegetación, animales e insectos pequeí±os parecido a un paraíso terrenal. Aquí iban quienes morían por alguna situación relacionada con el agua.
El Chichihuacuauhco (el lugar para los nií±os muertos)
El Chichihuacuauhco era un espacio para los nií±os que tenían una edad menor al primer aí±o, éste lugar nacen árboles nodrizas, con senos maternos como frutos, de los que brota leche, aquí es en donde los pequeí±os esperaban volver a la tierra cuando se destruyera la raza que la habitaba.
Mictlán (Inframundo)
A éste mundo, llegaban todas aquellas personas que fallecían por muerte común o por causa de un accidente, lo que indicaba que no habían sido elegidos de una manera especial por los dioses. El Mictlán, era un lugar oscuro, denso, bajo, en donde las almas deben realizar pruebas para poder resurgir, y para eso se debía cruzar un camino compuesto por nueve casas o dimensiones, que corresponden a los estratos del inframundo.

Chicunamictlan
Aquí, las almas encontraban el descanso anhelado. El Chicunamictlan, es donde se pasa por la âmuerte segundaâ. Y de acuerdo a los mexicas, el alma puede descansar ingresando a la naturaleza nuevamente.