Segundo contingente se abre paso por Chiapas; denuncian violaciones a derechos.
Por Agencias
Tuxtla Gtz. / Washington, DC.- Ante el âacechoâ de la caravana migrante de más de 3 mil 500 personas y a una semana de las elecciones legislativas, Donald Trump quiere abolir por decreto el derecho constitucional a la ciudadanía para todos los que nacen en territorio estadunidense.
El Presidente ha sacado este âas bajo la mangaâ, al día siguiente de comunicar sobre el envío de 5 mil 200 soldados a la frontera sur âen específico a Texas, Arizona y Californiaâ, para detener el paso de los miles de buscadores de asilo que recorre México.
El propio Trump llegó a referirse a los comicios del próximo martes como âlas elecciones de la caravanaâ, que ha llevado el tema de la inmigración al centro de la campaí±a, confiando en que movilice a sus bases para que impidan en las urnas que los republicanos pierdan el control del Congreso.
El derecho a la nacionalidad para todos los nacidos en territorio de Estados Unidos está consagrado en la 14 Enmienda de la Constitución.
Para cambiar la Constitución en EU se requiere una mayoría de dos tercios en el Congreso, algo impensable en un momento en que el país está muy dividido y hay poco consenso legislativo.
En la entrevista, el mandatario dijo que prevé firmar un decreto para que los nií±os nacidos en territorio estadounidense de padres inmigrantes, en situación irregular o no, no se beneficien más de ese derecho.
âSomos el único país del mundo donde, si una persona llega y tiene un bebé se convierte en ciudadano de Estados Unidos (...) con todos los beneficiosâ, afirmó. Pero lo anterior es falso, ya que son más de 30 naciones las que otorgan este derecho, incluyendo a México y Canadá.
Paul Ryan, jefe de la Cámara de Representantes, dijo que este derecho no se puede abolir con una orden del Ejecutivo.
âComo conservador que soy, creo en seguir lisa y llanamente el texto de la Constitución y creo que en este caso la 14 Enmienda es muy claraâ, afirmó.
Llega a Tapachula
La segunda caravana de migrantes centroamericanos que busca llegar a Estados Unidos retomó su camino este martes por Chiapas, un día después de cruzar ilegalmente la frontera desde Guatemala.
Los migrantes de El Salvador, Guatemala y Honduras llegaron al caer la noche a Tapachula luego de recorrer 25 kilómetros.
El grupo, conformado por unas 2 mil personas, salió al amanecer luego de descansar y secar la ropa que mojaron al atravesar a nado el río Suchiate.
El lunes, nií±os, mujeres y hombres se lanzaron en masa a las aguas del río ante la negativa de las autoridades mexicanas de abrir la frontera terrestre.
Buscan autobuses
Mientras tanto, la primera caravana de migrantes, en su mayoría hondureí±os, arribó por la tarde a la ciudad de Juchitán, en Oaxaca, luego de partir de madrugada de Niltepec.
Ese primer grupo fue albergado en una estación de autobuses que aún muestra los daí±os que dejó un sismo de 8.2 grados el 7 de septiembre de 2017.
Los migrantes y defensores de derechos humanos mexicanos han exigido les faciliten autobuses para llegar más rápido a Ciudad de México, donde solicitarán un permiso migratorio que les permita viajar libremente por el país y llegar incluso a la frontera con Estados Unidos. Sin embargo, aún no han obtenido respuesta.
Esa caravana sigue su marcha pese a las nuevas amenazas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien el lunes calificó al movimiento de âinvasiónâ a su país.
Deportados
Por su parte, la Secretaría de Gobernación (Interior) informó que deportó a dos hondureí±os buscados por la justicia, uno seí±alado como responsable del asesinato de tres personas y otro acusado de delitos ligados al narcotráfico.
Fueron âidentificaron dos ciudadanos hondureí±os contra quienes existen órdenes de captura vigentesâ, seí±aló el comunicado al detallar que fueron deportados vía área.
El escrito seí±ala que viajaban en la caravana migrante, pero no detalla en cuál de las dos ya internadas en suelo nacional.
Presión, responsable
Amnistía Internacional (AI) alertó que ha ido en aumento la seguridad en la frontera sur, ante la llegada de más caravanas migrantes.
Erika Guevara Rosas, directora para las Américas de AI, seí±aló que tras una semana de observación en Tapachula, Chiapas, se ha detectado un deterioro en la respuesta por parte del Gobierno mexicano.
â... Cada vez más restrictiva (respuesta), por parte de las autoridades, con algunos momentos de tensión, de choque, con algún grupo de las caravanas que han intentado cruzar a la fuerza y que han recibido una respuesta represiva por parte de autoridades mexicanasâ, comentó.
La activista consideró que el aumento de seguridad en la frontera sur se debe a una presión que existe por las declaraciones de Donald Trump.
Miembros del Parlamento Europeo pidieron a México una atención humanitaria a los centroamericanos.
Mediante una carta dirigida al embajador Mauricio Escanero, jefe de la Misión de México ante la Unión Europea, advirtieron que la migración desde Centroamérica se debe tanto a factores de violencia y pobreza en la región.
Y, aunque reconocieron la labor realizada por las autoridades mexicanas, dijeron estar preocupados por los reportes de las organizaciones no gubernamentales.
âSe han documentado diversas violaciones de derechos humanos cometidas: obstaculización por parte de policías federales, estatales y municipales en el acceso a territorio mexicano bajo diversos medios y gestionando únicamente el ingreso bajo la condición de someterse a una âdetención migratoriaââ.
Abordaje común
Funcionarios de Honduras, Guatemala, El Salvador y México crearon un mecanismo de coordinación a nivel de las subsecretarías de asuntos consulares y migratorios, para atender la formación de caravanas.
En una reunión en sede de la SRE en la Ciudad de México, los viceministros acordaron tener comunicaciones de manera periódica y tener un sistema de alarma cuando se amerite la intervención de los cancilleres de los cuatro países debido al éxodo de migrantes centroamericanos hacia Estados Unidos.
El embajador de Honduras en el país, Alden Rivera, detalló que la idea del mecanismo es tratar de tener un abordaje común regional de la situación migratoria.
Ya los esperan Trazar ruta a Saltillo
Carlos López, migrante salvadoreí±o que lleva dos meses en Saltillo, espera a dos de sus hermanas âTeresa y Marianaâ, las cuales viajan en la caravana que ayer llegó a Juchitán, Oaxaca. Una de ellas porta una cámara de video con la que documento su trajinar.
âHablé con ella (Mariana) hace unos días por teléfono y me dice que grabó a una mujer defendiendo a su bebé de la policía y que se le fue encima a muchos policías para poder continuar su camino con la caravanaâ, narra Carlos.
Teresa y Mariana compraron un teléfono modesto en una tienda de conveniencia y llamaron a su hermano en Saltillo para sentirse menos solas y vulnerables de lo que realmente están.
âMe dicen que los nií±os se están cansando porque no aguantan el paso de los adultos y que la gente de los lugares por donde pasan los apoyan con lo que pueden: medicamentos y comida principalmenteâ, dice Carlos de Jesús.
El sacerdote Pedro Pantoja Arreola, quiere que los migrantes en Saltillo que tengan familiares en la caravana los inviten a llegar hasta esta capital.
âHay gente hasta con 18 familiares en la caravana y yo les he dicho que vengan, que aquí los atenderemos y los asesoraremos para pedir el refugioâ, dice Pantoja Arreola en el comedor de la Casa del Migrante.
Ese comedor de sillas y mesas de plástico blanco fue además del punto de encuentro para la comida, un gran dormitorio durante 2014, cuando la casa recibió a una parte de la caravana centroamericana de entonces.
Aquella ocasión la cantidad de migrantes rebasó un 400% la capacidad de la casa que solamente es de 200 plazas, pero no importó porque la gente durmió en las canchas, los pasillos y otros espacios de la casa.
Tomar al noreste
Roger no duda en que la casa del migrante de Saltillo pueda ayudar a sus seres queridos y por eso, la última vez que habló con su cuí±ado Henry y sus amigos Miguel y Zairy, les pidió tomar la ruta noreste después de pasar la Ciudad de México.
Henry viene herido, una mano âfantasmaâ le lanzó una piedra en la cabeza y está descalabrado, aunque las heridas no son suficientes para detenerlo en su camino.
La esposa de Henry no quería que él se viniera a México por todos los peligros del camino, sin embargo, con engaí±os él salió de su casa y después le marcó a la madre de sus seis hijos para informarle que estaba dentro de la caravana que estaban cubriendo todos los medios de comunicación del continente.
âEres un hijo de la chingada, me dejaste con todos tus hijos aquí sola, ahora cómo le voy a hacerâ, fue lo que según Roger, su hermana le gritó a su esposo cuando se enteró de su intento por venir a México.
Como muchos de los migrantes, el caminante dejó prometido en Honduras que pronto mandará dinero para que toda su familia lo alcance en tierras aztecas y que la separación sólo será momentánea.
Roger viene de El Progreso, Honduras, comunidad de 100 mil habitantes, donde la mitad de sus habitantes viven con el salario mínimo y la clase media y alta representan sólo el 30% de la población.
Para ganarse la vida, él vendía plátanos, pero los maras lo obligaron a entregarles una cuota por su trabajo y entonces no pudo seguir trabajando.
Fueron muchas las presiones que los criminales ejercieron para que Roger se sumara a las maras, âporque a ellos les interesa que la gente joven de la ciudad se sume a sus grupos criminalesâ, dice el joven migrante de 27 aí±os.
íl día que se negó a ser uno de ellos, los delincuentes le mordieron la oreja y le arrancaron un pedazo de ella, âmira âdice mientras se jala la orejaâ, este es el recuerdo que me dejaron por no aceptar ser uno de ellosâ, narra.
Lo mismo sucede con todos los jóvenes de El Progreso y otras ciudades hondureí±as, por eso Miguel y Zairy, amigos de Roger, se sumaron a la caravana y cargan con su bebé camino hacia la Ciudad de México.
âPor el bebé les dije que se vinieran para Saltillo, porque aquí nos han dicho que van a apoyarlos y recibirlos, por lo menos no estarán solos, yo aquí los voy a esperarâ, dice Roger sin sonreír porque lleva el corazón más herido que la oreja que casi le arrancan los delincuentes.
âVoy a solicitar mi visa humanitaria y luego a conseguir un trabajo en la obra de construcción porque sé trabajar ahíâ, finaliza porque tiene que ir junto con sus compaí±eros a poner las mesas y sillas para la hora de la comida en la casa. (Rosalío González)