Mientras muchos se olvidan de las clases y disfrutan del verano, otros prevén el duro golpe que significará para su economía.
Por Rosalío González
Saltillo, Coahuila.- Borradores de migajón M 20; lápices âde color rojo carmínâ y ojos movibles âde 2 centímetros en adelanteâ, son algunos de los materiales que forman parte de las listas de útiles escolares para el próximo curso educativo, mismas que ascienden hasta los 3 mil pesos por estudiante.
Sin embargo, el viacrucis de los padres de familia no termina ahí, sino que continúa con la compra de dos conjuntos de uniformes, dos pares de zapatos, material higiénico para el mantenimiento de la escuela, una cuota âvoluntariaâ y una segunda cuota para el pago de intendencia, que en total ascienden hasta los 6 mil 500 pesos.
En escuelas de la ciudad los profesores entregaron listas hasta con 48 diferentes materiales, que de acuerdo con un ejercicio periodístico realizado con apoyo de la papelería Alameda, en el Centro de la ciudad, el presupuesto asciende hasta los 3 mil pesos por lista.
La tumba del ahorro familiar
En las papelerías del Centro de Saltillo, buscando ofertas, preguntando por los productos genéricos de la lista o solicitando créditos en expendios de uniformes escolares y zapaterías, cientos de padres de familia viven su propio viacrucis con los gastos para el regreso a clases.
En la Papelería Alameda, una de las más grandes del primer cuadro de la ciudad, Zócalo Saltillo solicitó el presupuesto de una lista escolar de 48 artículos diferentes, la cual corresponde a un estudiante de preescolar.
En la lista hay artículos como acuarelas de caja con brocha, mandil de plástico, sacapuntas de fierro con depósito, cuentos para leer y un bote jumbo con 16 piezas de crayolas gruesas.
Por lo menos la tercera parte de los artículos solicitados en la lista está acompaí±ada por âobservacionesâ que generalmente se refieren a la marca del producto que la escuela requiere para tomar como válido.
âA veces las maestras le ponen la marca más cara que hay del producto, no se miden, por eso los padres se molestan, pero uno (como comerciante) debe ofrecerles las alternativasâ, comentó la encargada de presupuestos de la papelería mencionada.
En nuestra lista encontramos al menos cinco productos solicitados de marca que valen hasta 200% más que los de otras marcas que cubren la misma función, âpero luego los padres tienen temor de llevarse otra marca y que en la escuela se lo regresenâ, aseguró la comerciante.
Una lista general de útiles escolares puede costar entre 2 mil 500 y 3 mil pesos, dependiendo de la escuela, debido a que cada plantel crea sus propias listas, que después son supervisadas y aprobadas por la Secretaría de Educación.
LISTA DE HIGIENE
La segunda lista que entregan en maternales, preescolares y primarias es de productos de higiene personal y limpieza del plantel: cubetas, trapeadores, escobas, talcos, geles antibacteriales, entre otros productos. La lista de este tipo más larga que Zócalo Saltillo documentó es la del Cendi, donde asisten bebés y maternales.
Surtir una lista de materiales de higiene y limpieza cuesta en un supermercado de la ciudad hasta 500 pesos; algunos de los productos más costosos son las toallas húmedas, los antibacteriales y las herramientas de aseo.
UNIFORMES
En Uniforama, expendio especializado en uniformes escolares que surte a alumnos de cualquier plantel, se informó a Zócalo Saltillo sobre sus presupuestos, que van desde los 900 pesos hasta los mil 800, dependiendo del nivel escolar.
Lilia Quezada Aguayo, encargada del negocio, aseguró que los padres surten dos uniformes por cada alumno, el âde diarioâ y el deportivo.
En el caso de los preescolares, los uniformes cuestan 500 pesos el formal y 400 pesos el deportivo, sin contar el bordado. Para la primaria los precios se elevan a 900 pesos por conjunto y para los de secundaria y preparatoria oscilan entre los 980 el deportivo y 570 el formal, dependiendo si se trata de pants o shorts.
âPara ayudar a los papás los comerciantes tenemos sistemas de apartado, por ejemplo, con 50 pesos apartas y luego vas pagando; cuando terminas te vamos entregando las piezas del uniformeâ, dijo Quezada Aguayo.
CUOTAS âVOLUNTARIASâ
De acuerdo con autoridades escolares, cada plantel establece una cuota a los padres de familia de acuerdo con sus necesidades; este dinero debería de usarse para las necesidades del plantel.
En algunas instituciones estas cuotas deben estar saldadas para poder inscribir a los estudiantes al próximo ciclo escolar, en otras dan mayor oportunidad de pagar en pagos la cuota.
En preescolares, por ejemplo, la cuota es de 300 pesos en promedio, aunque depende de cada plantel; en las primarias sube al doble o más.
CUOTA EXTRA
En algunas escuelas la Secretaría de Educación no ofrece el servicio de aseo y limpieza, por lo que la escuela tiene que contratar el servicio de un intendente, que es pagado con una segunda cuota impuesta a los padres.
La cuota de intendencia en promedio también es de 300 pesos, aunque en algunos casos los padres se ponen de acuerdo para hacer ellos mismos la limpieza de la escuela de sus hijos y ahorrarse el pago.
De acuerdo con los comerciantes, el viacrucis de los padres de familia dura aproximadamente entre 20 y 30 días, periodo durante el que se vuelcan a las papelerías, zapaterías y expendios de uniformes para cotizar los productos de su conveniencia.
La situación se torna un problema cuando en la familia hay más de uno o dos estudiantes, pues las listas, productos, presupuestos y los ceros en las cuentas para brindarles las herramientas para su formación académica, se multiplican.
Exigencias
» Varias escuelas exigen a los papás bordar todas las piezas de los uniformes de sus hijos y marcar cada útil escolar que utilizarán, costos que se suman a la compra de prendas y material para el aula.
Adicional
» Además de los útiles y uniformes, otros planteles manejan paquetes especializados de libros de texto, mismos que se adquieren con editoriales que manejan sus propios precios, los cuales van desde los 150 a los 550 pesos.
» También se suma el calzado escolar, pues muchas escuelas âsugierenâ a los papás ciertas marcas y estilos de zapatos y tenis deportivos.
