Aunque Clinton rápidamente se retractó de sus declaraciones, su rival Donald Trump aprovechó para intentar tomar ventaja y mejorar su posición.
Por: AFPEstados Unidos.- La candidata presidencial demócrata Hillary Clinton se retractó el sábado de haber llamado "deplorables" a la mitad de los electores de Donald Trump, desatando la ira de su rival republicano y una ola de críticas en las redes sociales.
En un acto para recaudar fondos la noche del viernes en Nueva York, la exsecretaria de Estado afirmó: "Para generalizar de una forma exagerada, podrías poner a la mitad de los partidarios de Trump en lo que llamo una cesta de deplorables [basket of deplorables]".
"Anoche fui extremadamente generalista y eso nunca es buena idea. Me arrepiento de haber dicho la 'mitad', eso estuvo mal", expresó la candidata este sábado en un comunicado, intentado aplacar la polémica.
La candidata a la Casa Blanca dio las polémicas declaraciones durante la gala "LGBT for Hillary", eventos que suelen ser cerrados a la prensa, pero que fue ante las cámaras de televisión.
Se trata del "racista, sexista, homófobo, xenófobo, islamófobo, como quieran llamarlo. Y por desgracia hay gente así y él (Trump) los despertó", había dicho Clinton ante defensores de los derechos homosexuales.
Esos simpatizantes de Trump son "irremediables, pero por fortuna no son Estados Unidos", había afirmado.
Para salir al paso de las críticas que suscitaron sus declaraciones, la candidata enumeró en el comunicado del sábado una serie de aspectos "deplorables" sobre Trump.
"Es deplorable que Trump haya construido ampliamente su campaí±a sobre el prejuicio y la paranoia, y dado una plataforma nacional a puntos de vista y voces de odio, seí±aló.
La exsecretaria del Departamento de Estado también reiteró sus denuncias al discurso "intolerante y la retórica racista" en la campaí±a a las presidenciales del 8 de noviembre.
"Entonces no pararé de denunciar la intolerancia y retórica racista en esta campaí±a", afirmó la candidata de 68 aí±os y quien podría convertirse en la primera mujer en dirigir Estados Unidos.
¿Un error?
"Wow, Hillary Clinton fue tan insultante con mis simpatizantes, millones de personas increíbles y muy trabajadoras. Creo que le costará en las encuestas!", respondió Trump temprano este sábado en Twitter.
La candidata demócrata cometió "el peor error de la temporada" al lanzar ese "ataque grotesco contra los electores estadounidenses", aí±adió posteriormente en un comunicado.
"Por primera vez en mucho tiempo emergieron sus verdaderos sentimientos, mostrando su sectarismo y su odio hacia millones de estadounidenses", aí±adió.
El compaí±ero de fórmula del magnate, Mike Pence, calificó por su parte de "deplorables" las declaraciones de la exdiplomática durante una conferencia de defensores de los valores conservadores.
"La verdad es que los hombres y las mujeres que apoyan a Donald Trump son estadounidenses que trabajan duro, granjeros, mineros, maestros, excombatientes, miembros de las fuerzas del orden", enumeró este ultraconservador.
"Ellos no son una canasta de nada, son estadounidenses y merecen su respeto".
Las declaraciones también despertaron fuertes reacciones en las redes sociales y el hashtag "Basket of Deplorables" se volvió rápidamente una tendencia en Twitter y se creó la cuenta @TheDeplorables.
Publicando una fotografía con tres personas, @ScottPresler, un simpatizante del republicano, escribió: "Mi familia. ¿Cuál es deplorable, Hillary? ¿El excombatiente, la mujer o el homosexual? Nos insultas", aí±adió.
A menos de dos meses de las elecciones, algunos comentaristas políticos empezaron a hablar de un serio error de parte de Clinton.
"En mi opinión, es lo peor que se puede decir", dijo en CNN Bob Beckel, quien se presenta como un anti-Trump.
"La cesta de deplorables de Clinton fue un error", escribió en Twitter Matthew Dowd, analista político de ABC News, estimando sin embargo que las consecuencias en las urnas no serán significativas. Las encuestas seí±alan una ajustada diferencia para las presidenciales de noviembre.
Clinton acudió este sábado a un nuevo evento para recaudar fondos en el norte de Nueva York, pero en este, al que la prensa no tuvo acceso, se mostró más prudente.
