WhatsApp
Pronostico del tiempo
Puentes Internacionales
Twitter
Instagram
YouTube
Facebook

+

‘Ser estrella de tv no era mi sueño’

  • 276

Prefirió jugársela en Hollywood, aun cuando no habí­a oportunidades para ella ni para ningún latino, a sabiendas de que podí­a quedarse con las manos vací­as.

  Por: El Universal   Los íngeles.- “A veces nos confundimos y cumplimos los sueí±os de otros”, explica Salma Hayek, pero ella tení­a muy claro cuáles eran los suyos y no estaban en México.   “Ser una estrella de televisión, de telenovelas, suena maravilloso, pero no era lo que yo querí­a; sin embargo, como impresiona que seas eso, dices: ‘eso es lo que yo quiero’. Yo no nada más querí­a ser actriz o famosa, para mí­ era más importante hacer cine, seguir creciendo, descubriendo mi talento. Sabí­a que si me quedaba, era el apuntador y ya. Y yo querí­a descubrirme, medirme. Y hacer cine, amo el cine”.   La actriz, que celebró cinco décadas de vida, comenta que prefirió jugársela en Hollywood, aun cuando no habí­a oportunidades para ella ni para ningún latino, a sabiendas de que podí­a quedarse con las manos vací­as.   “Me pregunté: ¿Con qué me voy a sentir más tranquila u orgullosa de mí­ misma: siendo exitosa en el medio o fracasando en el intento de hacer lo que yo quiera, aunque sea imposible? Porque en ese momento así­ era”.   En la industria del cine hollywoodense, recuerda Salma, habí­a tantos prejuicios que le cerraban las puertas constantemente.   “Me enfrentaba a una cultura donde trataba de romper un esquema donde no habí­a lugar para mí­. Habí­a una predisposición colectiva a algo que toman como normal: ésta es la realidad y así­ funciona, es una industria entera. En su cabeza no cabí­a esta posibilidad, ¿y para qué si así­ funciona y a nadie le interesa verlos a ustedes? Habí­a un nivel de ignorancia porque hasta para cuestiones de negocio, no sentí­an que tení­amos capacidad de protagonismo”.   Pionera. Después de ella llegaron otros latinos: Sofí­a Vergara, Demian Bichir, Kate del Castillo, Karla Souza, Eugenio Derbez y Ana de la Reguera, entre otros actores que ahora están participando en series y pelí­culas estadounidenses. “No sé si alguien más lo hubiera hecho. Pero definitivamente no habí­a apertura”, dice.   La protagonista de Frida dice que no se puede confiar en que, tras un papel, uno puede dar por sentado que llegó, pues esta batalla es constante.   “No es que te tome un tiempo, es batalla constante porque realmente a lo que hay que tirarle es hacer una carrera con longevidad. Porque puedes hacer una pelí­cula, tener cinco minutos de fama y luego ya nada. Hacer lo que me gusta hacer el mayor tiempo”.   En ese andar por la carrera ha tenido muchos ejemplos en su vida que le inspiran, afirma, pero no son precisamente estrellas de la industria del cine o la televisión, sino gente que ha conocido en su labor como voluntaria.   “He tenido la fortuna de conocer mujeres verdaderamente extraordinarias, que se supone que eran las ví­ctimas; algunas de éstas son las que más he admirado y me han inspirado más que nadie. Más que pensar: ‘quiero ser como esta actriz o activista’, me gusta recordar la fortaleza del espí­ritu de estas personas, su capacidad de claridad ante la vida. Tienen un poderí­o de paz y la capacidad de decir: ‘yo no soy ese problema, hay algo más de mí­ que soy’ y lo honran, están en paz y armoní­a, no como ví­ctimas”.   Del futuro no le gusta hablar, Salma cuenta que no tiene una imagen determinada de cómo será dentro de unos aí±os o de lo que estará haciendo, sino de realizarse en cada etapa. “Cuidado conmigo; en cualquier momento vuelvo a cambiar y a eso estoy abierta. Lo he pensado varias veces. Si me voy —de la carrera— es porque ya estoy satisfecha y porque tengo algo que me llena de pasión. No tengo una imagen de mí­ a futuro”.   Sobre si es verdad que es “inalcanzable”, lo acepta y hasta sus amigos se quejan de que no la ven lo suficiente. “Eso es verdad, pero cuando vives en diferentes lugares es muy complicado. Soy mamá y le echo muchas ganas.   “Tengo a Valentina y otros tres que son parte de nosotros, pero no todos viven conmigo. Es complicado mantener el contacto y cuando no los veo, trato de que no se sientan lejos.   “También soy activista, hago mucho trabajo que no se ve. Manejo dos fundaciones, con labor de oficina, juntas. Claro que soy accesible, pero porque yo no tengo acceso a mí­. Ya no veo más los emails, no me doy abasto, tengo ahora 7 mil, entonces me agobio, entro en estrés y mejor me hago mi burbuja, y no es por desconectada de la humanidad. Pero una vez que tienes acceso a mí­, estoy. No soy distante, me engancho fácilmente, soy súper veracruzana. Cada momentito de verdad estoy”.
Publicación anterior Mueren dos niños en incendio causado por una veladora
Siguiente publicación VIDEO: Tanque del Ejército sirio sobrevive al impacto de misil
Entradas relacionadas
Comentarios
  TV en Vivo ;