A diferencia de los civiles, los miembros del ejército de Corea del Sur tienen prohibido practicar sexo con personas del mismo sexo.
Por: Agencias
Corea del Sur.- El ejército de Corea del Sur se ha visto envuelto en una grave polémica. Mientras sus vecinos del norte se dedican a mostrar músculo militar, en el sur se han propuesto desenmascarar a sus soldados que realicen actos homosexuales durante su etapa de servicio. Para crear una lista de 40-50 sospechosos han creado un perfil falso en una aplicación móvil para gais, una medida que ha generado controversia.
A diferencia de los civiles, los miembros del ejército de Corea del Sur tienen prohibido practicar sexo con personas del mismo sexo. Si los descubren pueden enfrentarse a penas de prisión que llegan hasta los dos aí±os de cárcel, por lo que los soldados gais prefieren mantener oculta su tendencia sexual durante su paso por el ejército.
Un vídeo de dos soldados practicando sexo provocó el inicio de la âcaza de los homosexualesâ
Según detalla Quartz, esta âcaza de homosexualesâ empezó, supuestamente, después de que saliera a la luz un vídeo donde dos hombres vestidos con uniformes militares mantenían relaciones sexuales. El jefe del estado mayor ha querido presionar para acabar con estas prácticas. Por el momento ya se ha detenido a una persona y la investigación sigue en marcha.
El grupo activista Centro Militar de Derechos Humanos de Corea del Sur (MHRCK) ha destapado el uso de las apps de citas para homosexuales por parte del ejército. Han sacado a la luz capturas de pantalla donde aparecen algunas conversaciones subidas de tono entre dos supuestos militares donde se intercambian fotos y se solicita información personal. El objetivo sería tener localizados a los soldados gais gracias a un perfil falso.
Por su parte, fuentes del ejército de Corea del Sur niegan estar utilizando perfiles falsos y aseguran que las investigaciones se están centrando en analizar en profundidad el caso del vídeo. Afirman que los derechos de cualquier soldado homosexual están garantizados, aunque aquí les han llevado la contraria varias asociaciones del colectivo LGBT.
Con información de La Vanguardia
