Por: AgenciasÂ
Ciudad De México.- Al nacer su bebé, los médicos le dieron la peor noticia de su vida; este perdería el brazo izquierdo y a los diez días se lo amputaron.
El nií±o tenía un coágulo de sangre y Ben Ryan no paraba de pensar en todas las actividades que no podría realizar hasta su primer aí±o, cuando de acuerdo con los doctores, podría recibir ayuda prostética.
No obstante, para él sería insuficiente, por lo que decidió crearle su propio brazo prostético que se activara a partir de movimientos muy pequeí±os con el codo y trabajó en un laboratorio de innovación de la Universidad de Bangor.
"Cuando empecé a hablar con Ben y supe qué quería hacer me quedé muy impresionado", recuerda Wyn Griffith, jefe técnico de Innovation Pontio.
Así, con ayuda de tecnología de última generación, diseí±aron e imprimieron juntos un nuevo brazo con el que el nií±o es capaz de realizar un 90 por ciento de tareas, aunque lo están perfeccionando.