
Saltillo, Coah.- El Inegi reporta que en Coahuila 191 mil 241 parejas prefieren vivir en unión libre que contraer matrimonio, lo que el sacerdote Fermín Parra González lo atribuye a la “cultura de lo desechable” y falta de compromiso de las personas.
Ya todo se puede usar y tirar, tanto el material para una fiesta, para un adorno. Y se vino dando una cultura que al final de cuentas afecta también lo que es el corazón, la mente, la forma de vida”, explicó el párroco.
También influye que ahora hay más divorcios en las familias, lo que desmotiva a los hijos a casarse por la iglesia o el civil; hay desinterés en asumir compromisos eternos.
Temor a responsabilidad
Para casarse por el civil las parejas deben tomar un curso y, dentro de la Iglesia Católica, los jóvenes acuden a retiros para novios y a cursos prematrimoniales para fortalecer la relación y el compromiso espiritual.
Hacer estos cursos creo que fortalece bastante, da luces para decir ‘es por aquí mi vida’ en el matrimonio, o también es con él o con ella, si sí conviene así cómo nos vimos. O dicen algunos que dan estos cursos que al final dicen ‘nosotros buscábamos aclararlos para que se consolidara (la relación), y otros acaban diciendo no, mejor contigo no, busco otra opción”, dijo el sacerdote Fermín.
Afrontan indecisión
Lamentablemente, los jóvenes evaden el compromiso matrimonial y prefieren vivir en unión libre, falta de compromiso que también se observa en la rotación laboral y al cambiar de carrera, con un año o dos ya cursados.
A veces podemos pensar que son muchos los requisitos que nos piden para vivir el sacramento del matrimonio, como incluso el estar confirmado, el tener la primera comunión y algunos de nuestros fieles, de nuestros católicos, pues se confirman porque se van a casar, si no, no hacían los sacramentos, pero es necesario”.
Añadió que la vida en matrimonio es difícil porque deben coincidir dos visiones, dos pensamientos, pero lo que cuesta, es lo que vale.
Añadió que cuando se presenta abuso físico o emocional en el noviazgo, la persona agredida debe abandonar la relación, volviendo válido el divorcio.
EQE