Piedras Negras, Coah.- Pionero en el fútbol americano de Piedras Negras y quien llevó los colores del Club Venados siempre en su corazón, el arquitecto José María Guajardo Pérez, dejó una gran huella en todas las personas que lo conocieron, pero principalmente en cada uno de los que formaron los equipos.
Un hombre que será recordado por su amor al deporte y su cariño siempre a todos los niños y adolescentes que pasaron por las filas de Venados, donde con un gran amor paternal los guió y dio consejos.
Así fue el arquitecto José María Guajardo Pérez, hijo de don José María Guajardo Garza y de doña Gudelia Pérez Medrano, quienes le dieron a cuatro hermanos: Yolanda, Martha Alicia, José Luis y Juan Jaime.
Nació el 27 de noviembre de 1946 en Juárez, Coahuila, donde vivió sus primeros años junto a su familia, luego los estudios le llevarían por otras latitudes.
Inició sus estudios en la escuela primaria Centenario y posteriormente estuvo en la Escuela Secundaria Venustiano Carranza, ambas instituciones en Sabinas, Coahuila.
Decidido a realizar una carrera profesional, desde adolescente migró a Monterrey, donde realizó su bachillerato en la Preparatoria número 1, para luego entrar a la Facultad de Arquitectura en la Universidad Autónoma de Nuevo León.
Desde niño gustaba del deporte, así que en la universidad no dudó en formar parte del equipo Pegasos de fútbol americano, para luego destacar como fullback en la Liga Mayor con los Tigres de la UNI.
Además del fútbol americano era gran aficionado al fútbol soccer, por lo que fue parte del Club Holanda de la liga de veteranos.
José María Guajardo Pérez, fue fundador de la cabalgata La Grande que se realiza de Saltillo a Piedras Negras.
Se casó con la señora Elvira Uribe Cadena y aunque no tuvieron hijos biológicos, volcó su amor paternal a los niños y adolescentes que formaron parte de las filas de Venados club del que fue fundador en 1976 junto con don Mario de la Cabada.
Sus niños, hoy hombres de bien, lo recuerdan y resaltan su gran trayectoria y cómo dejó una gran enseñanza de vida en ellos, no solo el amor al deporte, sino enfrentar la vida con pasión y corazón.
En una fotografía de antaño se le puede observar con esa sonrisa que siempre le caracterizó, feliz y emocionado, luego de obtener la victoria con su entrañable equipo Venados.
Y en las redes sociales, también lo recuerdan con textos que llegan al alma, al recordarle.
“Descanse en paz nuestro querido y estimado coach arquitecto José María Guajardo; toda una institución en el inicio y éxito del fútbol americano de Piedras Negras siempre con los colores del Club Venados en su corazón”, precisó Gerardo Peña Galván.
En su texto enfatiza en cómo supo transmitirles el conocimiento y amor al deporte de la tacleadas y darse cuenta que formaría parte de su vida, donde aprendieron también a valorar la amistad, el respeto a todas las personas y sobre todo a la familia.
También el jugar con pasión y corazón y poner el 200 por ciento en cada juego.
“Todos los que jugamos con él, fuimos como sus hijos, había un amor y respeto mutuo”, indicó.
“Chema te nos fuiste muy pronto, duele mucho tu partida, pero se que algún día nos volveremos a ver, tu ya gozas el descanso eterno y seguro ya te habrás encontrado a muchos venados que se nos adelantaron en el camino; descansa en paz querido coach”, puntualizó.
madpf
