Saltillo, Coah.- En Coahuila hay niños que fueron abandonados ante la terrible adicción y dependencia de sus padres a drogas y sustancias, son los llamados “huérfanos del cristal”, niños y niñas que quedaron desprotegidos porque sus padres prefieren drogarse sin control con la droga sintética, sin importar su cuidado.
El consumo de cristal no sólo ha elevado los casos de violencia familiar e influye en la desaparición de personas que huyen de sus hogares para drogarse, también impacta en la protección de niños y niñas, los más vulnerables ante el consumo de este veneno derivado de las metanfetaminas, que ha trastocado la paz de los hogares coahuilenses.
Las afectaciones del cristal no sólo son para quienes lo consumen, repercute de manera directa en su entorno social, destruye familias y deja en riesgo a los más pequeños, los más vulnerables, que quedan en el abandono o bajo tutela del Estado porque sus padres no están conscientes para criarlos.
Se incrementa abandono, y también las tragedias
En lo que va del año, se han registrado al menos siete casos en los que los niños y niñas quedaron desprotegidos ante la adicción de sus padres al cristal. Son seis menores que fueron retirados de sus familias por estar en riesgo, así como un caso en el que desafortunamente, una pequeña perdió la vida porque su madre adicta la puso en las manos equivocadas.
Este fue el caso de la pequeña Monserrat, niña víctima de feminicidio, a ella no sólo la mataron su padre y su madrastra, su muerte fue el producto de una mala decisión de su madre, quien enfrentaba su adicción al cristal.
Monserrat tenía 7 años cuando comenzó su infierno. Su madre la entregó a su padre porque ella se internaría en un anexo para intentar dejar al cristal, por lo que ya no pudo cuidar de la niña.
Monserrat quedó a cargo de quien se supone debía protegerla, el que debía velar por su bienestar, pero esto no sucedió. La niña fue víctima de múltiples maltratos y abusos por parte de su propio padre y su madrastra, y debido a esta tortura falleció.
Intoxicados ponen en riesgo a menores
“El panorama es muy riesgoso cuando el papá o mamá están con un problema de adicciones”, declara María Teresa Araiza Llaguno, procuradora de los Niños, las Niñas y la Familia, quien aseguró que por su adicción, las personas dejan de cumplir con las funciones parentales, e incluso, cuando están en altos índices de intoxicación, muchas veces duermen más de el tiempo y esto genera los descuidos que causan omisiones de cuidado y el abandono.
Los riesgos que corren los menores van desde una grave omisión de cuidados, como en el caso de Monse, hasta ser agredidos por sus propios padres, quienes se comportan de manera violenta al estar intoxicados con la droga.
Uno de estos casos es el de los hermanitos Erick Alexander, de 9 años, y Ángel, de un año. Ambos fueron agredidos por su madre, quien los apuñaló al estar bajo los efectos del cristal.
Los niños dormían mientras sus padres Sahori Alexandra y su marido Héctor se drogaban en la sala de su hogar, en plena alucinación causada por la droga, Sahori
apuñaló a sus vástagos.
La mujer que les dio la vida también quería quitárselas, ya que su estado de intoxicación no le permitió tomar consciencia de que agredía a sus propios hijos.
En este caso, el padre de los menores reaccionó a tiempo y pudo rescatarlos de una muerte trágica.
Los menores fueron resguardados por las autoridades de la Pronnif, quienes de inmediato aplicaron un protocolo de protección por lo que quedaron a cargo de un familiar de apoyo, mientras su madre y su padre fueron internados en rehabilitación.
“Eso es una de las causales, como todas, en donde puede llegar a una situación en la que el niño o la niña no puede estar en un entorno con esas condiciones, porque corre peligro y es en donde se buscan las medidas de protección”, reiteró Araiza Llaguno.
Proteger a la infancia
La procuradora explicó que el trabajo de la Pronnif en estos casos, primero es buscar una red de apoyo para los menores violentados o maltratados, dentro de su mismo entorno social, ya sean sus abuelos, tíos o algún otro familiar.
Sin embargo, en muchos casos, la adicción está presente también en el círculo social cercano a los menores, por ello, son ingresados a la Casa Hogar del sistema DIF, donde son atendidos mientras sus padres ingresan a un programa de rehabilitación.
“Esta situación es preocupante”, señaló Norma Alicia Pérez, directora del Centro de Integración Juvenil, quien considera que el consumo de cristal está robando la tranquilidad de los hogares coahuilenses, a la par de que manifiesta que los episodios de violencia y ataques sicóticos resultan cada vez más frecuentes y están desintegrando a familias enteras.
Destroza a las familias
En 2023, Coahuila registró 9 mil 54 detenciones por narcomenudeo, mismas que se traducen en personas adictas a las drogas.
Del total de arrestos 100% fueron por posesión de cristal, mientras que se estima que al menos 40% de esas detenciones corresponde a padres y madres con hijos menores de edad.
Salen de infierno a la orfandad
Las casas hogares o albergues que reciben a menores entre los 3 y los 12 años, en promedio, han incrementado su población en el estado, principalmente por las adicciones.
En el caso de Torreón se estima que 98% de los menores ingresados a la Casa Hogar fue por la adicción sin control de sus padres durante este año.
En el caso de Piedras Negras, el pasado 4 de abril se alertó del incremento de 300% de menores llevados a la Casa Hogar Nazareth por la Pronnif, ante la omisión de los padres por su dependencia sin control, principalmente al cristal.
jacl
