Por FRANCISCO VARGAS M. Enviado
RINCÓN DE ROMOS, Aguascalientes. 21 de enero 2024. Interesante resultó la Corrida de Feria de Rincón de Romos en honor al Señor de las Angustias, en la cual se alzó como gran triunfador el matador de toros mexiquense José Mauricio, al cortar un total de tres orejas, premios que le valieron para salir en hombros al final del festejo, en el que Antonio Ferrera dejó ver su maestría y gran oficio, el toricantano Ricardo Leos mostró nerviosismo toda la tarde, mientras que el rejoneador Jorge Hernández Gárate tuvo actuación más que decorosa dando una vuelta al ruedo, y los Forcados Amadores de México, lograron una espectacular pega al primer intento.
Con un lleno en el Lienzo Charro, siendo notaria la significativa cantidad de aficionados de esta ciudad capital de Aguascalientes, encabezados por la gobernadora Tere Jiménez, que estuvo presente acompañada de su esposo, el licenciado y ganadero Luis Alberto Villareal; con un clima fresco se jugó un encierro de la ganadería de San Fernando, que cumplió en varas, bien presentado, pero de juego desigual.
El de rejones, bueno con recorrido, palmas en el arrastre. En lo que toca a los toros de lidia ordinaria primero, distraído recibiendo algunas palmas; segundo, rajado aquerenciado en tablas; tercero, bravo con gran clase, transmisión y calidad, premiado con el arrastre lento; cuarto, bravucón y deslucido; quinto, de embestidas descompuestas, volviendo corto por el izquierdo; y sexto, incierto.
JORGE HERNÁNDEZ GÁRATE (Rejoneador)
Montando a “Tin Tan”, recibió a “Honorable”, al que le dejó dos rejones de castigo. Con “Clavillazo”, templó a la grupa a la mínima distancia, clavando tres banderillas en todo lo alto, una de ellas al violín. Por su parte, los Forcados Amadores de México, por conducto del forcado de cara Carlos Tirado, realizaron espectacular pega, siendo el rabillador su hermano René. Prosiguió Hernández Gárate arriba de “Cachorro”, colocando una banderilla corta y dos rosas. El rejón de muerte lo dejó trasero sin surtir efectos, por lo que se bajó de la cabalgadura pasaportando al toro al primer golpe de descabello. Dando una vuelta al ruedo acompañado del forcado Carlos Tirado, recibiendo palmas el toro en el arrastre.
ANTONIO FERRERA (Verde Agua Marina y Oro)
A “Fortachón”, lo recibió recreándose a la verónica por ambos lados, cerrando con media pinturera mirando el tendido. En varas vino un tumbo de manera espectacular a Juan Cobos. Una vez que se llevó a cabo la devolución de los trastos, el diestro balear inició su faena con pases a media altura, viniendo su primera serie por el derecho, siguiendo con tandas por el izquierdo con temple y relajamiento, acusando su tendencia el toro irse a tablas, siendo ahí donde le robó meritorios naturales tersos, ligados con adornos como molinetes invertidos y pase del desdén. Pinchazo y estocada entera caída, recibiendo calurosas palmas.
Su segundo fue “Destino”, bravucón desde salida por lo que abrevió con capa. Sarga en mano, una vez que atemperó las bruscas embestidas del negro zaino, extrajo series por el derecho de gran valía a base de pelearle y meterse en los terrenos del toro deslucido que embestía con la cara a media altura. Dejó una estocada delantera y caída que no fue suficiente concluyendo al segundo golpe de descabello escuchando palmas de aliento.
JOSÉ MAURICIO (Verde Olivo y Oro)
El primero de su lote fue “Forjador”, con el que se abrió de capa con verónicas de manera armoniosa jugando los brazos cerrando con media, quitando de manera lucida por chicuelinas rubricando con media. Con torería
y empaque inició por alto, ligando sabroso pase de trincherilla y el de pecho. Posteriormente vino una faena por ambos lados artística y clase, con estructura y entendida, haciendo el toreo en redondo por el derecho que el respetable disfrutó, logrando después series por el izquierdo con naturales tersos y templados, todo entre las notas de la ‘Pelea de Gallos’, aprovechando en todo momento las bravas, nobles y francas embestidas del jabonero, siendo el colofón pases por bajo rodilla en tierra. Con determinación se fue tras el acero, dejando una estocada entera para escuchar el grito de ¡torero! ¡torero!, siendo premiado con las dos orejas del bravo toro que recibió el arrastre lento, dando la vuelta triunfal José Mauricio acompañado del ganadero Santiago Pérez Salazar Zabala.
Con “Bombón”, abrevió con capa, y muleta en mano, pases por bajo flexionando la pierna de salida, fue como comenzó su faena haciéndole un extraño el burel. A pesar de las descompuestas embestidas y que volvía en un palmo de terreno por el izquierdo, José Mauricio le extrajo meritorios pases a base de jugársela y ponerle valor, dejando ver también su solvente técnica, concluyendo con labor de aliño. En la suerte suprema colocó una estocada un poco trasera que surtió efectos siendo premiado por el juez de plaza Joaquín Chávez de manera acertada con una oreja.
RICARDO LEOS (Grana y Oro)
El toro de su alternativa se llamó “Vial”, número 24, con 504 kilos, al que recibió con una larga cambiada cerrado en tablas, verónicas por ambos lados y revolera escuchando diana desde las alturas. Una vez realizada la ceremonia de la alternativa, inició por bajo para enseguida trazar muletazos por el derecho viéndose un tanto apresurado. Con un poco de más asentamiento logró aceptables pases ante las nobles embestidas del castaño brocho que salía distraído y con cierta sosería dejando ver cierto nerviosismo Leos, quien se puso pesado con el acero por lo que escuchó dos avisos retirándose entre división.
El cierra plaza fue “Debutante”, mismo que remató con fuerza en varias ocasiones en tablas, desprendiendo varias de ellas, desmontando en varas a Guillermo Cobos, convirtiéndose en un herradero el ruedo. En lo que toca con muleta, por alto comenzó su labor, sacando pases con más de voluntad que lucimiento haciendo señales el toricantano que el toro estaba reparado de la vista. Vino posteriormente momentos de desconfianza e inseguridad en sus procedimientos por lo que el respetable se metió con Ricardo, quien en la suerte suprema pinchó al primer viaje, dejando en el otro media estocada, retirándose entre el grito de ¡toro! ¡toro!
Al final, ante un público satisfecho por lo presenciado, el diestro José Mauricio salió en hombros, llegando de esta manera la conclusión del festejo taurino.
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