Ciudad de México.- En redes sociales, se hizo viral la historia de un abuelito de 87 años, que denunció a través que fue despojado de su departamento. Según contó, lo puso en renta para comprar las medicinas de su esposa, que tiene 92 años, pero la inquilina los despojó y después vendió el inmueble como si fuera suyo.
Melquiades Alvarado es un adulto mayor jubilado que vive en Venezuela, junto a su esposa. Según contó en un video publicado el pasado 15 de octubre, su departamento fue robado por una inquilina. En la grabación viral el hombre de 87 años dice: “Me robaron mi apartamento y necesito la ayuda de ustedes”.
Según contó, compró ese departamento en 1979, mientras trabajaba en PDVSA, empresa paraestatal que controla la producción de petróleo en Venezuela.
Vivieron por varias décadas en aquel inmueble hasta que la necesidad los obligó a dejarlo. Con el fin de pagar las cuentas médicas y comprar sus medicinas, la pareja decidió poner en renta su casa.
“Yo sufro de tensión alta desde hace bastantes años y mi esposa está ahorita con demencia senil, tiene año y medio en cama”, comenta.
Como resultado, la pareja no ha conseguido pagar sus medicinas y en cambio ha perdido su patrimonio. Melquiades Alvarado resumió su situación de la siguiente forma:
Tengo 87 años y mi esposa 92 años. Nuestro único apartamento lo alquilamos para pagar medicinas y nuestra inquilina lo vendió a otra persona sin nuestro permiso.
El departamento lo rentaron a Gémina Campos, quien era concejala del municipio de Baruta, donde viven. Esta funcionaria los despojó del inmueble y lo vendió, como si fuera suyo.
Según señaló Melquiades Alvarado, esta mujer se encuentra actualmente presa por varios delitos, entre ellos el despojo que sufrió la pareja nonagenaria. Sin embargo, pese haber demostrado que son dueños de su casa, no han podido recuperarla.
Ella decidió robarnos a un par de viejos nonagenarios y nosotros en nuestros últimos años de vida nos quedamos sin hogar.
Melquiades ha solicitado la ayuda de los usuarios de redes sociales para que las autoridades venezolanas devuelvan su departamento. El hombre de 87 años finalizó su mensaje alegando que teme por su seguridad pues, aunque la concejala está presa, el marido de ella está libre: “Tengo miedo, me dicen que su esposo es una persona influyente. Solo quiero entrar a mi casa”.
