Ciudad de México.- Por demás interesante y atractiva resultó la tienta que se llevó a cabo por dos días, en la ganadería Pedro Haces e hijos, que se ubica en el rancho ‘La Piedad’, enclavado en la alcaldía de Tlalpan, en la Ciudad de México, divisa color rosa mexicano, azul celeste y verde menta, propiedad del senador, empresario, apoderado y director general de la empresa “Don Bull Productions”, don Pedro Haces Barba.
En dicha labor de campo en esta dehesa que cumplirá 100 años el próximo 2024, participaron los matadores de toros y los novilleros que tomarán parte en la próxima Feria Nacional de Zacatecas 2023, quienes, a la gentil invitación del ganadero, probaron la bravura de ejemplares de esta casa ganadera, única que asienta sus reales en la capital del país.
En el primer día de labores, ante la presencia de varios invitados del sector político, sindical y empresarial del país mexicano, abrió las hostilidades el reconocido aficionado práctico Pedro Haces Lago, quien, como hijo del anfitrión, probó un novillo con el que se recreó tanto con capa como en muleta.
Siguieron los matadores de toros aguascalentenses Arturo Macías y Juan Pablo Sánchez. El primero de ellos quien ya reapareció después de la grave cornada que sufrió en la pasada Feria Nacional de San Marcos, participando en varias corridas triunfando en cada una de ellas, no escatimó un ápice al desbordarse en el ruedo; mientras que Juan Pablo se prodigó en su faceta lidiadora como también dejó patente su temple y mando.
Juan Fernando, llegado desde su tierra natal de Monterrey, y quien se alzó como el triunfador de la Corrida del 86 Aniversario de la Plaza Monumental de la sultana del norte, también fue parte de esta importante doble jornada campera.
El mexiquense Ernesto Javier “Calita” logró faena de arte y gran clase. Por su parte el tlaxcalteca Sergio Flores y el también acalitano Héctor Gutiérrez realizaron su torero de profundidad y empaque; estando en ese mismo tenor el zacatecano Antonio Romero, quien se entonó en una faena valiosa que tuvo gran miga.
Cabe mencionar que también participaron los novilleros Julián Garibay, César Pacheco, César Ruíz y Efrén Cabrera, quienes bajo la guía del matador Manolo Mejía aquilataron la oportunidad de obtener más conocimientos y experiencia de la técnica del toreo a la vera de los matadores. Al final se aprobaron algunos toros mismos que se convertirán en sementales.
Al siguiente día, las acciones transcurrieron con menos invitados por lo que contaron con mayor intimidad los toreros, con un son más reposado y la oportunidad de escuchar de forma directa los comentarios del ganadero Pedro Haces. Los matadores Sergio Flores, Antonio Romero y Héctor Gutiérrez se dieron un banquete del buen torear, gracias a las embestidas de los bravos toros de esta importante casa ganadera capitalina; en la cual se confirma que: “La grandeza del toreo es la bella creación del arte, en donde se pone en juego la existencia de la vida sobre la muerte”.
AFPR
