Por: Redacción
Múzquiz, Coahuila.- Múzquiz, pueblo sin ley y a merced de los exploradores y explotadores del mineral de carbón, en el olvido de los inspectores de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, pero además solapados por las autoridades de este municipio de Múzquiz.
Los quejosos dijeron que con doble discurso atienden la queja de los habitantes pero, por otro lado dan carta abierta a quienes atropellan los derechos humanos e incluso cuando con la creación de tajos, desaparezcan espacios deportivos, denunciaron vecinos.
Tal es el caso de los habitantes de la Villa de las Esperanzas, que se manifestaron este fin de semana para exponer su inconformidad con respecto a la apertura de un tajo, precisamente donde se encuentra un campo "llanero", en el que desde hace muchos años los de la liga local juegan futbol, espacio que además era utilizado por las mujeres para hacer ejercicio.
Quienes expusieron la queja y que obviamente no se atreven a dar su nombre, dijeron que la alcaldesa, Tania Flores, acudió de inmediato a su llamado para escucharlos y que se comprometió a no dar el permiso de uso de suelo y menos que destruyeran el campo deportivo.
Como es costumbre, la alcaldesa, simplemente está ignorando la demanda de las amas de casa y vecinos del barrio La Vulka y sólo acudió para tomarles la medida, afirmando que no lo permitiría, pero este lunes el predio en cuestión ya está completamente cercado, junto con los caminos y brechas del lugar, dejando sólo el camino que utilizan los carboneros.
Los vecinos sólo identifican a un ingeniero, de nombre Winston Bernal, como el encargado de los trabajos que ahí se están haciendo y contratando personal, porque el proyecto no tiene ningún tinte de que se vaya a suspender, pero se presume que el empresario es de la ciudad de Sabinas, lo cual no fue confirmado por los vecinos del lugar.
Las personas dijeron que dentro de sus quejas aprovecharon para pedirle a Tania Flores Guerra que mandara tapar un antiguo tajo que operaban grupos de la delincuencia y que nunca taparon, dejándolo lleno de agua y a unos pocos metros de sus patios, pero la respuesta fue negativa y tajante, ya que implicaba mucho dinero cumplirles esa demanda.
Recordaron que fue durante la administración de Cipriano Portales, sin permiso de nadie, sin autorización un grupo de personas simplemente llegó, prácticamente en los patios de sus casas y empezaron a hacer un tajo, que actualmente sigue abierto representando un grave peligro de contaminación y de riesgo de accidentes para los niños y cualquier persona.
Hicieron mención que en el último año de esa administración PAN - UDC, el Ejército fue y decomisó la maquinaria que ahí en este tajo laboraba y se llevaron a todos los trabajadores detenidos, siendo una acción que finalmente trajo tranquilidad a la población, pero que ahora vuelve a ocurrir, sólo que solapados los carboneros por la autoridad municipal.
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