Saltillo, Coah.- En medio de una lluvia de aplausos, Jorge Ruperto se abrió paso entre la caravana de médicos y familiares que lo vitorearon en el camino hacia su cita con el destino, la más importante de su vida.
Y es que el joven de apenas 22 años se convirtió en donante de órganos, con lo que cambiará el futuro de 11 personas.
Proveniente de una familia típica saltillense de la clase media, el altruista pasó de ser un hombre común al héroe de muchos.
En las primeras horas de ayer, un grupo de especialistas del IMSS en la Clínica 2 realizó la cirugía de extracción de órganos, que fueron enviados a diferentes partes del país.
Apenas hace unos días, Ruperto soñaba con el futuro prometedor que su joven vida le auguraba, pero un accidente laboral truncó sus ilusiones.
Desde ahora, la memoria del joven permanecerá imborrable en los corazones de muchos, y de a quienes regaló una nueva oportunidad.
El albañil de 22 años que el jueves pasado cayó de una altura de tres metros cuando trabajaba en una construcción en la Zona Centro, murió ayer a consecuencia de las lesiones producidas tras el accidente.
Jorge Ruperto Rodríguez Cardozo, de 22 años, falleció por la madrugada en una sala de la Clínica 2 del IMSS, en donde era atendido por las graves lesiones que sufrió.
Al día siguiente del accidente, José fue diagnosticado con trauma de cráneo severo y muerte cerebral, por lo que dependía de un respirador artificial, y solo un milagro lo podía salvar.
Agentes de la Fiscalía se hicieron presentes en el nosocomio y se entrevistaron con la familia, para después dar paso a los elementos de la Unidad de Inspección Criminalística que al final ordenaron el levantamiento del cadáver.
