Por: Grupo Zócalo
Ciudad de México.- Por segundo día consecutivo, normalistas de Ayotzinapa atacaron instalaciones militares y esta vez fue en Iguala en el 27 Batallón de infantería en donde le prendieron fuego a un camión que lo estrellaron en la puerta.
Los estudiantes, que demandan la presentación con vida de sus 43 compañeros desaparecidos en Iguala hace casi ocho años, primero incendiaron colchones fuera de la puerta del cuartel militar en donde estaban colocadas varias barricadas.
Con gritos de “fue el Ejército, fue el Ejército”, los jóvenes que iban encapuchados retiraron las barricadas y después empezaron a arrojar petardos al interior del 27 Batallón.
Desde el exterior del inmueble militar se vio el humo que desprendía al estallar los petardos.
Un grupo de policías militares estaba dentro del cuartel, pero no intervinieron.
El ataque contra las instalaciones militares ocurrió después que padres de los 43 encabezaron un mitin en el que exigieron al Presidente Andrés Manuel López Obrador que detenga a los mandos militares a quienes, aseguraron, su Gobierno los está protegiendo.
El 27 Batallón está ubicado frente a un edificio comercial que es propiedad del ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca Velázquez, quien este martes un juez federal lo exoneró por la desaparición de los 43 normalistas, aunque permanece en prisión por otros delitos como el asesinato del líder social Arturo Cardona, en mayo del 2013.
Según el informe del subsecretario de Gobernación, Alejandro Encinas Rodríguez, un coronel del 27 Batallón ordenó que seis normalistas fueran asesinados.
“No sabemos por qué este Gobierno protege al Ejército si es el responsable de lo que ocurrió aquí en Iguala”, dijo uno de los padres.
Después del ataque al cuartel, los normalistas se retiraron en los autobuses en los que llegaron a Iguala.
