El estruendo de una explosión despertó a los habitantes de la privada Biznaga poco antes de que sus alarmas sonaran.
“Lo primero que pensé era que que había pasado aquí dentro de la casa peor no encontré nada que hubiera estallado”, expresó Gilberto Ramírez.
Esta privada cerca del fraccionamiento Cactus, donde ocurrió la explosión, a casi 500 metros de las casas, tiene las ventanas, vidrios y puertas afectadas severamente ante el temblor que por segundos sintieron sus habitantes.
Incluso las ventanas y vidrios de la caseta de la entrada fueron destruidos, una inversión que consideran “perdida” sin que alguien pueda hacerse cargo del gasto de reparación.
Sin embargo, eso no es importante, hay veladoras al interior de los hogares y oraciones para las vidas perdidas durante la explosión.
“Que lamentable, sea por accidente o atentado, porque creo ya hubo un muerto, Dios lo tenga en su santa gloria, y quién sabe los demás cómo estén, ojalá y no pase a mayores”, expresó Doña Susana Arriaga.
Postergaron trabajo, escuela y quehaceres
Alguien tocó a mi puerta y dijeron que debíamos evacuar, así como estábamos en pijama o sin bañar, salimos a la calle por nuestra seguridad, dijeron los colonos de la privada donde ocurrió la explosión.
Quienes tomaron un par de cambios e hicieron sus maletas para buscar asilo en casa de amigos y familiares, mientras que unos se negaron a abandonar sus hogares.
“Más tarde, nos dijeron que ya no había riesgo y que podíamos mantenernos en casa”, expresaron los también espectadores de las maniobras de rescate, esperando que todos los afectados pudieran estar con vida.
Al menos hoy ya no fui a la escuela, expresó una estudiante de universidad, pues al momento de salir el paso estaba bloqueado y no podían entrar o salir vehículos, ni siquiera encenderlos.
Algunos trabajadores fueron ya tarde a sus empleos ante el bloque en el paso para salir y alguna amas de casa prefirieron resguardarse sin salir a hacer mandados a la calle.
Esta mañana, aseguran, la vida vale más que otros días, pues afortunadamente, están vivos.
