Por: Agencia Reforma
Ciudad de México.- El primer día de la votación de Morena para elegir a congresistas nacionales se distinguió por el acarreo masivo por parte de los candidatos, lo que terminó por desbordar y generar caos y violencia en centros de votación.
De los 20 estados donde se realizó ayer la contienda interna, en 16 predominaron las denuncias, de los propios morenistas, de acarreo, compra y coacción del voto, lo que provocó que se suspendiera el proceso en algunos distritos.
Además, se registraron enfrentamientos entre los grupos de aspirantes, quema y robo de papelería y destrucción del mobiliario electoral. De estas irregularidades se acusó a legisladores locales y federales, alcaldes y otros funcionarios estatales y municipales.
De estas 20 entidades saldrán mil 630 de los 3 mil morenistas que integrarán el Congreso Nacional, máxima autoridad de Morena que elegirá en septiembre al Consejo y dirigencia nacional que conducirá la elección del 2023 y 2024, el resto se seleccionará hoy domingo en 12 estados más.
En la Ciudad de México, los cinco alcaldes morenistas también recurrieron a la movilización de sus estructuras, por lo que se les acusó de acarrear a sus bases.
Se registraron enfrentamientos en diversas sedes, como Iztacalco, y en Coyoacán se denunció la entrega de despensas por parte de legisladores locales.
En diversos puntos se exhibieron a los votantes que llevaban en un papelito los nombres de los dos congresistas por los que debían votar.
En Veracruz, la Policía Municipal de Minatitlán detuvo y esposó a la diputada local, Jessica Ramírez, candidata a congresista, tras armar un disturbio en una casilla. La legisladora acusó a la alcaldesa, Carmen Medel de impedir el paso a los escrutadores y a gente que no votara a su favor.
En Oaxaca, en dos centros de votación, en Juchitán y Matías Romero, se suspendió la jornada electoral porque los morenistas quemaron o destrozaron la papelería.
Lo mismo sucedió en Amozoc, Puebla, en protesta por el acarreo que acacharon al alcalde Mario de la Rosa en apoyo de su hija Zuri de la Rosa; en Tehuacán, la dirigencia afirmó que perdió 10% de la papelería luego de que un grupo la destruyera.
En Michoacán se denunció a un policía de Tacámbaro que supuestamente rellenaba urnas con boletas a favor de la regidora Karen Monserrat Gaona, y en Zitácuaro difundieron videos de camionetas con el logo del DIF operando a favor del hermano del secretario de Gobierno.
En Colima y Zacatecas, una senadora y diputada local, respectivamente, acusaron a alcaldes y funcionarios de usar a los servidores de la nación para coaccionar el voto e ir a votar por sus allegados.
En Tijuana, Baja California, se acusó que Filiberto Pozos y María de Jesús Sánchez ofrecían hasta mil 500 pesos por votar por esa dupla.
En tanto, el líder nacional de Morena, Mario Delgado, afirmó que se anularán las elecciones en los distritos donde la dirigencia “compruebe” que hubo irregularidades, y aseguró que el acarreo solo es ilegal cuando se condiciona el voto.
