Por Grupo Zócalo
Ciudad de México.- Juan Medina, un joven de 28 años que había ahorrado durante varios años gran parte de su sueldo para poder comprarse su propio auto y así dejar de usar el transporte público para trasladarse a su trabajo, optó por comprarse un vehículo seminuevo en la agencia KIA sucursal Satélite, Tlalnepantla, pero nunca se imaginó que fuera detenido porque el auto tenía reporte de robo.
En entrevista para MILENIO, Juan detalló que regresaba del trabajo y fueron policías de tránsito y Policías de Investigación (PDI) que lo detuvieron en calles de la Ciudad de la México.
“Empiezan a revisar los sellos Repuve, cuando se dan cuenta enseguida que el sello, el engomado es falso, y el tema de la verificación son falsos, me piden que saliera del carro que van a revisar los números de serie ya que podría ser indicio de qué el coche pudiera venir de manera no legal”, explicó.
Y en efecto, fue trasladado por policías de investigación a la Fiscalía de Investigación de Azcapotzalco, en donde estuvo dos noches detenido y esposado.
“Me sorprendió porque toda la información que me están dando cuando escaneaban, arrojaba quien estaba reclamando el carro, el día que fue robado, y la fecha en la que hicieron el reporte de robo”, explicó.
Cuando solicitó apoyo de la agencia y al vendedor, estos no le pudieron resolver lo sucedido, por lo que decidió demandarlos por encubrimiento por receptación y fraude.
“Se presume que cuando menos, ellos tenían el pleno conocimiento de cuales eran los actos mínimos de pendientes a prevenir, porqué ellos sabían que vendían un carro robado”, detalló Luis Esquivel, abogado de Juan.
MILENIO solicitó una postura por parte de la agencia, y éste se negó a hablar, mientras tanto, Juan no tiene coche y mucho menos sus 259 mil pesos que pago por él.
“Sólo espero que este tema se puede esclarecer lo más rápido posible, pues en casa el coche es una herramienta que nació del fruto del esfuerzo mía y de mis padres”, recalcó.
