Por Néstor Jiménez
Monclova, Coah.- Un conductor borracho estuvo a punto de ocasionar una tragedia y milagrosamente resultó ileso cuando con su camioneta impactó dos automóviles estáticos y partió un poste de madera por la mitad en la colonia Barrera, la madrugada de ayer.
Este responde al nombre de Ezequiel Ramírez Hernández de 64 años, vecino de la calle División del Norte entre Almadén y Gómez Palacio del sector antes mencionado.
Cerca de la 01:30 de la mañana, el ebrio circulaba a exceso de velocidad por la calle Adolfo López Mateos a bordo de su camioneta Ford Lobo color guindo.
Al subir la cuesta, poco después del parque Xochipilli 1 perdió el control del volante y se proyectó contra un automóvil Volkswagen Bora color negro, que se encontraba estático en la acera derecha propiedad de Juan Sierra.
Tras ese primer impacto, la loca carrera de Ramírez Hernández siguió su curso y estrelló aparatosamente en la parte trasera a una camioneta GMC color blanco, que también estaba estática.
Además de arrastrarla la Lobo guinda terminó su labor destructiva incrustada contra un poste de madera propiedad de Teléfonos de México, que fue partido por completo.
Los vecinos salieron de inmediato al sitio y pidieron el apoyo del departamento de Seguridad Pública, acudiendo agentes de Peritaje además de socorristas de Cruz Roja.
Ezequiel se lamentaba y lloraba por lo que había provocado, y afortunadamente no presentaba golpes que pusieron en riesgo su vida, a pesar de lo aparatoso del accidente.
Los agentes de Control de Accidentes llevaron a cabo el croquis y el correspondiente para luego llevar al responsable al departamento de Seguridad Pública, donde adoptó una actitud intransigente.
Este respondería por los daños y muy probablemente sería consignado al Ministerio Público del Fuero Común mientras que los vehículos eran llevados a un corralón.
