Por Carlos Rodríguez
Saltillo, Coah.- Los médicos pasantes acudirán a clínicas y lugares en donde se garanticen las condiciones mínimas para que ejerzan su trabajo de forma segura, señaló Jesús Ángel Padilla, director de la Facultad, quien respaldó el pliego petitorio de los estudiantes, y señaló que ya no serán carne de cañón.
“Los alumnos no están dispuestos a seguir siendo carne de cañón ni a ser el último eslabón de la cadena médica, y tampoco ser los que resuelvan las necesidades médicas de la comunidad ante la falta de plazas”, declaró.
Ayer, más de 100 estudiantes marcharon pacíficamente desde la Facultad de Medicina hasta el Palacio de Gobierno, pidiendo seguridad para realizar su trabajo como practicantes, y en solidaridad con el gremio, luego de la muerte de Erik David Andrade Ramírez, quien fue asesinado en Durango.
Entre las garantías que exigen los pasantes de médicos a las autoridades de Salud y cada uno de los órdenes de Gobierno están que haya acceso en vehículos; seguridad; infraestructura básica de comunicaciones y alojamiento, así como medicamentos, señaló Jesús Padilla, director de la Facultad de Medicina de la UAdeC, quien detalló que han recibido ya varias quejas.
“Algunas quejas son menores, otras son preocupantes, como por ejemplo en el ejido Fraustro, donde a nuestra pasante le colocaron en una vara, en su centro de salud, la cabeza de un animal muerto con una amenaza. No tienen agua en la clínica, y en lugar de alguna cama les pusieron unas tablas para que se durmieran allí, o no tienen señal de telefonía”, detalló.
Actualmente son 75 médicos pasantes de la UAdeC los que realizan su servicio social y a quienes se les tendrán que garantizar condiciones de seguridad para ello, finalizó
Padilla.
