Piedras Negras, Coahuila. - La llegada diaria de migrantes a Piedras Negras se agudizó este miércoles en el exterior de la casa “Frontera Digna” en donde se concentraron más de 500 en espera de un plato de comida, que les permitieran bañarse y ser incluidos en la lista de autoridades norteamericanas para obtener una visa humanitaria.
Hombres, mujeres y muchos niños estuvieron afuera de las mencionadas instalaciones, sobre la calle Anáhuac, en espera de uno de los 350 platillos preparados por las religiosas que colaboran con el albergue, como es el caso de una migrante hondureña que llegó hace tres semanas con su esposo, dos hijos y un tío.
Otro centroamericano, quien llego hace un mes a Piedras Negras con su esposa y cinco hijos, indicó que tienen que asistir a diario a la casa “Frontera Digna” para comer una vez al día, ya que como migrantes no los dejan trabajar mientras esperan cruzar a Estados Unidos.
Así mismo José Alberto Arcila, pastor de la Iglesia Metodista Aleluya, dijo que los miércoles de cada semana estará llevando 50 bocadillos para aquellos migrantes que no tengan que comer, mismos que en unos cuantos minutos se terminaron
