Mientras Pekín seguía sumida en la angustia por el Covid, los trabajadores de Shanghái desinfectaban las estaciones de metro antes de la reapertura de cuatro líneas para el domingo.
Por: ForbesÂ
Shanghái avanzó el sábado con cautela en sus planes para restaurar parte de su red de transportes, un paso importante para salir de un confinamiento por el Covid-19 que ha durado semanas, mientras que Pekín prevé sus defensas ante un brote que ha persistido durante un mes.
La cuarentena en Shanghái desde principios de abril ha supuesto un duro golpe económico para la ciudad más poblada de China y ha suscitado un debate sobre la sostenibilidad de la política nacional de cero Covid.
A diferencia del centro financiero, Pekín se ha abstenido de imponer un confinamiento en toda la ciudad, pero sólo con docenas de nuevos casos al día frente a las decenas de millas de Shanghái en su punto álgido.
Aun así, los controles y las interminables pruebas masivas impuestas en la capital china han desestabilizado su economía y trastornado la vida normal.
Mientras Pekín seguía sumida en la angustia por el Covid, los trabajadores de Shanghái desinfectaban las estaciones de metro y los trenes antes de la reapertura prevista de cuatro líneas de metro el domingo.
Aunque el servicio tendrá un horario limitado, permitirá a los residentes desplazarse entre los distritos y satisfacer la necesidad de conexión con las estaciones de tren y uno de los dos aeropuertos de la ciudad. También se reabrirán más de 200 líneas de autobús.
Mientras Pekín seguía sumida en la angustia por el Covid, los trabajadores de Shanghái desinfectaban las estaciones de metro y los trenes antes de la reapertura prevista de cuatro líneas de metro el domingo.
Aunque el servicio tendrá un horario limitado, permitirá a los residentes desplazarse entre los distritos y satisfacer la necesidad de conexión con las estaciones de tren y uno de los dos aeropuertos de la ciudad. También se reabrirán más de 200 líneas de autobús.