
Lo único que las ha mantenido en pie es la esperanza de hallar a sus hijos desaparecidos, que regresen a casa
Por: Luis DurónÂ
Saltillo.- Para Marcela y Rosa este Día de las Madres no hay nada que festejar, hace una década les robaron el alma, les arrebataron su felicidad, les apagaron la dicha de ser madre.Â
Lo único que las ha mantenido en pie estos aí±os es la esperanza de encontrar a sus hijos desaparecidos, de que regresen a casa, de volver a abrazarlos, de volver a festejar que son madres.Â
Desaparece 2 veces
En el caso de Marcela, su hijo Cosme Humberto Alarcón Balderas ha desaparecido dos veces, la primera aquel 5 de mayo de 2011, cuando el joven de entonces 16 aí±os quedó de verla afuera de una tienda de autoservicio, pero nunca llegó.Â
Ahí comenzó el calvario, así lo describe Marcela, recorrer sola hospitales, cárceles y semefos porque las autoridades necesitaban 72 horas para poder actuar, porque para las autoridades el joven había huido de su casa por ser maltratado por su madre, porque a los policías investigadores no les importaba.
âYo busco en hospitales, busco en el Semefo, busco en los separos y no se encontraba él ahí, entonces puse mi denuncia y me dice la MP âva a regresar, al rato regresa, a lo mejor se fue de âvoladilloâ o anda con unas amigasâ, y es que no es así, él nunca hace eso, él nunca se ha ido de vago, él se dedicaba a la escuela y a trabajar solamenteâ.
Ese día, la agente del Ministerio Público se limitó a tomar el teléfono y llamar al Semefo preguntando si había algún cuerpo con las características de Cosme, al obtener una negativa le dijo a Marcela que no había nada y que la investigación la pasaría a los agentes.Â
Malas noticias
Así transcurrieron siete aí±os, siete aí±os en los que Marcela se integró al colectivo Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila, donde encontró el apoyo que las autoridades no le dieron, donde la guiaron para que interpusiera su denuncia, para que exigiera justicia y la localización de su hijo.Â
Fue en esa búsqueda que Marcela se enteró de la verdad, su hijo había fallecido, fue asesinado el mismo día de su desaparición y las autoridades lo sabían, durante siete aí±os sufrió una tortura, la incertidumbre de no saber nada sobre su hijo.
âHasta 2018 supe que Cosme había fallecido ese mismo día de su desaparición, hubo muchas negligencias. Bueno, hicieron tres exhumaciones, la última fue el 8 de marzo del aí±o pasado, que fue la exhumación masiva, no se encontró ningún resultado, no encuentran el cuerpo de mi hijo, tienen desaparecido el cuerpo de mi hijoâ.
Esta fue la segunda vez que Cosme desapareció, y es que a pesar de que las autoridades de la Fiscalía General del Estado tenían el expediente sobre la muerte de Cosme y las fotografías de sus restos, el cadáver del joven no aparece.Â
Ahora lo único que les queda a las autoridades es buscar en la Escuela de Medicina para ver si el cadáver fue donado.
Decepcionada de la justicia
Marcela se dice decepcionada de la justicia en Coahuila, tampoco hay detenidos por el asesinato de su hijo, nadie puede explicarle lo que sucedió hace 11 aí±os, esa noche que le apagaron su alma.Â
Marcela continúa su búsqueda, sigue acudiendo a las exhumaciones masivas que realizan la Fiscalía y la Comisión de Búsqueda, con la esperanza de que entre esos cadáveres se encuentren los restos de su hijo.
âMe tiene tranquila el saber que él ya está descansando porque yo estaba siempre con la angustia, la zozobra de decir â¿y si comerá?, ¿estará bien?, ¿lo maltrataran? ¿o si está muerto? ¿está vivo?, o sea, era una angustia muy grande, entonces ahora que sé que ya no está pues es una tranquilidadâ.
Para Marcela la lucha y la búsqueda continúan, no va a descansar hasta recuperar los restos de su hijo, de Cosme, el nií±o de 16 aí±os al que lo desaparecieron dos veces.
https://youtu.be/dCRLneqB-Gc
Un beso y una bendición a diario
En el caso de Rosa Angélica, su hijo Jaime César ílvarez García desapareció el 6 de enero de 2012, en su trayecto a Estados Unidos, el joven de entonces 27 aí±os residía en Dallas, lo último que supieron de él fue que estaba en Piedras Negras, ahí fue donde desapareció.
âLorena, la pareja que él tenía en Estados Unidos nos comentó que había recibido un mensaje de César, que le comentaba que lo llevaban por un rancho, pero no sabemos, hasta ahí fue todo lo que se supo y desde ese día hasta hoy, pues no hemos sabido nadaâ.
Desde ese día, Rosa Angélica despierta cada maí±ana y lo primero que hace es darle un beso a la foto de César, mantiene la esperanza de que un día César va a regresar y entonces podrá darle ese beso y ese abrazo diario.
âTodos los días le doy su bendiciónâ
âEste beso tiene mi hijo, todos los días yo lo beso, cuando me salgo, cuando ya me voy a trabajar, oro primero a Dios y ya cuando me voy le doy su bendición y le doy un beso y le digo âhijito de mi vida, que el Seí±or te bendiga y te guardeâ. Eso es todos los días, todos los días desde que mi hijo desapareció, no hay día que yo no le dé su bendición y no hay día que yo no le bese su mejilla, su frenteâ.
El recuerdo de Jaime César pesa cada día en su madre, quien dice no descansará hasta encontrarlo, hasta verlo regresar a su hogar, con los suyos.Â
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Seguirán en la lucha
 La historia de Marcela y Rosa Angélica se replica en las más de 2 mil familias que tienen a un integrante desaparecido, según datos de la Fiscalía, la cifra total es de 2 mil 170 personas desaparecidas en Coahuila.Â
Son más de 2 mil madres que este 10 de mayo saldrán a las calles no a festejar, sino a seguir luchando, a seguir buscándolos, a seguir exigiendo justicia por la desaparición de sus hijos.Â
Son madres que no tienen nada que festejar porque les arrebataron un pedazo de su vida, les quitaron su felicidad, por eso a diario gritan.