El Gobierno de Ucrania denunció inmediatamente el âimperialismoâ ruso.
Por: EFE
Moscú.-  Rusia admitió este viernes por primera vez que quiere crear un corredor terrestre desde el Donbás a la anexionada península de Crimea y reveló que su plan bélico no para ahí, sino que incluye tomar el sur para unirlo con la región separatista prorrusa de Transnistria, en Moldavia, según un alto mando militar.
âDesde el inició de la segunda fase de la operación especial, que comenzó literalmente hace dos días, una de la tareas del Ejército ruso es establecer el pleno control sobre el Donbás y el sur de Ucraniaâ, seí±aló el comandante en funciones del Distrito Militar Central de Rusia, general mayor Rustam Minnekéyev.
El Gobierno de Ucrania denunció inmediatamente el âimperialismoâ ruso y destacó que Rusia ha revelado sus verdaderas intenciones de su ofensiva militar, que no es, como anunció inicialmente la âdesnazificaciónâ del país vecino.
âDejaron de ocultarlo. Hoy, el comando de saqueadores, violadores y asesinos rusos reconoció que el objetivo de la âsegunda faseâ de la guerra no es una victoria sobre los míticos nazis, sino simplemente la ocupación del este y sur de Ucraniaâ, seí±aló el Ministerio de Defensa de Ucrania.
âEl imperialismo (ruso) tal cualâ, recalcó.
El jefe de la Oficina del Presidente de Ucrania, Andriy Yermak, recordó que âmuchos de los planes del Kremlin ya han fracasado gracias al trabajo del Ejército y el pueblo ucranianoâ.
DEL ESTE AL SUR Y DEL SUR A MOLDAVIA
El control total sobre el este y sur de Ucrania âpermitirá establecer un corredor terrestre a Crimea y ganar influencia sobre instalaciones vitales de la economía ucraniana y los puertos del mar Negro a través de los cuales se envían los productos agrícolas y metalúrgicos a otros paísesâ, según el general mayor ruso.
Pero es más, afirmó Minnekéyev, según la agencia oficial TASS, âel control sobre el sur de Ucrania es además una vía de acceder a Transnistria donde también se constatan los hechos de discriminación contra los residentes de habla rusaâ.
El supuesto âgenocidioâ de la población prorrusa en el Donbás ha sido uno de los argumentos esgrimidos por el presidente ruso, Vladímir Putin, para lanzar su campaí±a militar en Ucrania.
Transnistria, territorio de apenas medio millón de habitantes, en su mayoría eslavos (rusos y ucranianos), rompió los lazos con Moldavia tras un conflicto armado en 1992-1993 en el que contó con ayuda rusa.
En virtud de un acuerdo para la solución pacífica del conflicto, Rusia emplazó más de 2 mil efectivos para garantizar la paz.
El pasado 5 de marzo, el territorio separatista pidió que se reconozca su independencia.
âEllos (los rusos) no van a parar. El comando del distrito militar central ruso anunció la próxima víctima de la agresión rusaâ, denunció el Ministerio de Defensa ucraniano.
âDespués de hacerse con el control del sur de Ucrania, Rusia planea invadir Moldavia, donde dicen que los rusoparlantes están siendo oprimidosâ, enfatizó.
El Kremlin no ha confirmado ni desmentido las palabras del general mayor.
Hasta ahora tanto Putin como su ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, solo habían hablado de que el objetivo âprincipalâ de la campaí±a militar rusa en esta segunda fase era la âliberación completa del Donbásâ, formado por las regiones de Donetsk y Lugansk, cuya independencia reconoció el mandatario días antes de lanzar la âllamada operación militar especialâ.
Tampoco han hablado del corredor terrestre, ni mucho menos de planes de tomar el sur o de llegar hasta Transnistria.
EL SUR BAJO ATAQUE DESDE HACE DOS MESES
Kiev ha afirmado desde el principio que el objetivo de Rusia es crear un corredor terrestre desde Crimea al Donbás, pero las palabras de Minnekéyev implican ir mucho más al oeste de la península, desde la ciudad de Jersón, que ya controlan, hasta Odesa y desde allí a la frontera con Moldavia.
En el sur y este de Ucrania, âlos ocupantes continúan haciendo todo lo posible para conseguir un motivo para hablar de al menos algunas victoriasâ, aseguró anoche el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
âEstán acumulando fuerzas, llevando nuevos grupos tácticos de batallón a nuestra tierra. Incluso están tratando de iniciar la llamada movilización en las regiones ocupadas de Ucraniaâ, afirmó.
Ninguno de estos pasos ayudará a Rusia. Solo pueden retrasar lo inevitable: el momento en que los invasores tendrán que abandonar nuestro territorio. En particular de Mariúpol, una ciudad que sigue resistiendo, a pesar de todo lo que digan los ocupantesâ, enfatizó.
El jueves Putin y ShoigúÂ celebraron la âliberación de Maripúpolâ, en la región de Donetsk, aunque aún resisten en la planta de Azovstal unos 2 mil efectivos ucranianos y unos mil civiles.