
Se prevé que las lluvias vuelvan a azotar la región durante este fin de semana.
Por: EFEÂ
Johannesburgo.-  Ascienden a 395 las víctimas mortales en el este de Sudáfrica por las devastadoras inundaciones que viene registrando la provincia sudafricana de KwaZulu-Natal desde el lunes, mientras continúan las tareas de emergencia y se prevé que las lluvias vuelvan a azotar la región durante este fin de semana.
El consejero provincial de Gobierno Cooperativo y Asuntos Tradicionales, Sipho Hlomuka, declaró hoy de que la mayoría de las muertes tuvieron lugar en el área metropolitana de Durban, la urbe más poblada de KwaZulu-Natal y la tercera más grande de Sudáfrica.
Igualmente, dijo que alrededor de 40 mil 723 habitantes han debido desplazarse en esta zona, donde el agua ha anegado viviendas y dejado incomunicados a muchos ciudadanos, sin electricidad y sin agua corriente.
Las lluvias dieron este jueves una tregua a la región, pero se espera que las precipitaciones regresen a partir de hoy, con lo que los equipos de emergencia trabajaban a contrarreloj para dar refugio a los miles de afectados, buscar a las decenas de desaparecidos y prevenir mayores daí±os en las golpeadas infraestructuras y viviendas.
El ministro sudafricano de Finanzas, Enoch Godongwana, informó este viernes en declaraciones a la cadena de televisión local Newzroom Afrika de que el Gobierno cuenta con 1.000 millones de rands sudafricanos (unos 63 millones de euros) disponibles de manera inmediata para dar respuesta a las inundaciones.
âCada aí±o hacemos un presupuesto para emergencias como esta y esa cantidad está disponible, puede utilizarse desde el mismo lunesâ, declaró Godongwana.
KwaZulu-Natal viene experimentando un aumento de esta clase de fenómenos climáticos en los últimos aí±os.
Los más graves de los tiempos recientes se dieron en 2019, cuando las lluvias torrenciales e inundaciones dejaron unos 80 muertos en esta misma época del aí±o.
Esta provincia lidia aún, además, con la desolación causada por los graves disturbios que Sudáfrica vivió en julio de 2021 y que se vivieron con mayor intensidad precisamente en KwaZulu-Natal, donde se registraron 275 de los 354 muertos que dejaron aquellos incidentes.