âSi social e institucionalmente existe un vacío que no ocupa el Estado, alguien lo va a ocuparâ.
Por Agencia Reforma
Ciudad de México.- El tres veces candidato presidencial Cuauhtémoc Cárdenas demandó un Estado fuerte para poder enfrentar amenazas e intereses externos e internos, así como recuperar partes del territorio que controla la delincuencia.
âEn las condiciones actuales, crecimiento y paz social demandan que el Estado se apodere y rescate territorios y actividades que hoy controla e impera la delincuenciaâ, indicó en la presentación de un informe en la UNAM.
âQue sea su presencia (del Estado) la que se imponga mediante la implantación y expansión de proyectos productivos, escuelas, universidades, clínicas, programas de innovación tecnológica y capacitación para el trabajo en cada porción del territorio nacional y se desplacen así esos graves cánceresâ.
Cárdenas consideró necesaria la presencia y las acciones permanentes del Estado en todo el territorio nacional, para mantener colectividades sanas y constructivas, y economías con crecimiento sostenido.
âSi social e institucionalmente existe un vacío en el territorio que no ocupa el Estado, alguien lo va a ocuparâ, apuntó el presidente de la Fundación para la Democracia.
Cárdenas participó ayer en la presentación del Informe del Desarrollo en México, Coordenadas para el Debate del Desarrollo, organizado por la UNAM, el donde se refirió al panorama del país a partir de distintas amenazas e intereses creados.
Coincidió con algunos de los autores del Informe al seí±alar que hay una institucionalidad del Estado precaria, producto de diversos factores desde hace tiempo, pero que es necesario fortalecer y evitar grietas en el Estado de derecho por las que pudieran colarse intereses desestabilizadores de dentro y de fuera.
âEl Estado necesario para ejercitar la soberanía, por mandato democrático y popular, es necesariamente un Estado fuerte por sus capacidades de acción en favor de la nación y del pueblo, en el marco de un pleno y efectivo Estado de derechoâ, aseveró.
âFuerte también por su autoridad moral, obtenida de la legitimidad de su origen y la observancia estricta del Estado de derecho, del respaldo popular, que será más efectivo en la medida en que se encuentre democráticamente organizado y que conforme a nuestra experiencia histórica resulta indispensable para afrontar la agresividad política, cultural y económica del exterior y la interna del entreguismoâ.
El exjefe de Gobierno de la Ciudad de México dijo que en estos problemas de institucionalidad estatal precaria y deficiencias en el Estado de derecho, tanto Estado como sociedad âjuntos y separadosâ tienen su responsabilidad.
El Estado, seí±aló, requiere fortaleza, capacidades profesionales, finanzas sólidas, confianza de la gente para incentivar el esfuerzo social y privado, impulsar un desarrollo y una distribución equitativas âevitando privilegios indebidos y desviaciones impuestos por intereses creadosâ.
Y expresó su coincidencia con algunos de los autores del Informe presentado, quienes plantearon los límites al desarrollo sostenido en el país, el aumento de la desigualdad y de los sectores afectados por una vida precaria, dentro de una pandemia que no termina.
âAplaudo las propuestas de vías de solución que están planteadas y que podrían llevarse a la práctica respecto a un sistema universal de seguridad social, la implementación de una renta básica también universal, una profunda reforma hacendaria, fiscal, tributaria que garantice los recursos necesarios para el desarrollo en el largo plazo, una política laboral acorde a estos tiempos y al futuroâ, expresó.