
âDe lo que me acusan, es cosa juzgada. El Tribunal (Electoral) ya decidió, déjenme trabajar, no voy a traicionar a mis electoresâ: Cuauhtémoc Blanco
Por: Proceso
Ciudad de México.- Cuauhtémoc Blanco Bravo, alcalde de Cuernavaca, rindió su primer informe de labores la tarde de este martes en el Museo de la Ciudad, acompaí±ado de representantes de la sociedad morelense.
Desde ahí advirtió: âDe lo que me acusan, es cosa juzgada. El Tribunal (Electoral) ya decidió, déjenme trabajar, no voy a traicionar a mis electoresâ.
En el recinto, agregó: âHan sido unos días bien complicados. De muchísima impotencia. Hasta me tuve que poner en huelga de hambre para denunciar públicamente las transas que están haciendo⦠y para que las autoridades les pusieran un hasta aquí. Gracias a Dios ya los volvieron a frenar. Pero sí quiero aprovechar para aclarar algunas cosasâ.
Y se fue de largo: âMe siguen difamando y ya estuvo bueno. En primer lugar: mi candidatura fue legal. Y la gente votó por mí. Tengo todo el derecho de ser presidente municipal⦠y no me lo van a quitar. El Tribunal Electoral es la única autoridad que puede decir: âcumple con los requisitos o noâ, y ya dijo que sí (los cumplí) en su momento. Ya es cosa juzgada. Me quisieron revocar el mandato, luego me quisieron suspender del cargo y ahora quieren hacerme un juicio político por algo que no es ciertoâ, sostuvo en medio de aplausos.
Esta tarde, posiblemente fue la segunda vez en un aí±o que el alcalde usó traje, no negro como el de hace un aí±o, sino gris tornasol.
Blanco Bravo lee bien. Casi no trastabilla. Se entiende que estuvo practicando el discurso. âLo que está pasando es muy obvio. Estos personajes tienen miedo. Están acostumbrados a amenazar a la gente. Yo no les quise seguir el juego. Cuando llegué al municipio me di cuenta de que estaban robando el dinero de la gente. Claro que los corríâ, relató.
âNo me importó que estos personajes fueran del partido que me postuló (Partido Social Demócrata), porque yo no me debo a ningún partido. Yo me debo a la gente. A esas 40 mil personas que votaron por mí, no los voy a traicionar, porque soy una persona luchona, soy una persona que dice las cosas de frente. Yo vengo de abajoâ, afirmó.
Estoy acostumbrado a defenderme, âpor eso, me voy a defender hasta las últimas consecuenciasâ, afirmó en medio de aplausos y porras de sus simpatizantes.
Los rumores de protestas y actos de boicot por parte de sus detractores fueron exorcizados esta tarde por la presencia de vecinos de distintas colonias y por los representantes de la sociedad que se dieron cita en el antiguo ayuntamiento.
âSe me hace una injusticia robarle a la gente, pero es más injusto robarle a la gente más necesitada. Yo escucho a los más necesitados, porque soy como ellos. Ahora que estuve en protesta en la Catedral, venía la gente a apoyarme. La gente vino a pedir que no me rajara, y no me voy a rajar. A estas personas les voy a pedir que me dejen trabajarâ, dijo.
Cuauhtémoc Blanco agradeció a âlos políticos de otros estadosâ que âcreen que la política es sólo una oportunidad de servir, en verdad graciasâ, en particular âle agradezco al diputado (federal perredista por Tabasco), Candelario Pérez (Alvarado) por su apoyoâ. También agradeció a los presidentes municipales de todos los partidos políticos que en días pasados emitieron un comunicado a su favor: âGracias por su apoyo y no nos vamos a dejar seí±ores presidentes municipalesâ.
Rompe en llanto Vino el momento emotivo. A Cuauhtémoc Blanco, quien ha demostrado en las últimas semanas que es sentimental, se le quebró la voz y se le volvieron a salir las lágrimas, al agradecerle âa mis amigos de siempre, a los futbolistas que saben que los quiero, que los estimo. Ustedes saben lo que hemos sufrido para poder salir adelanteâ.
Y llegaron las porras: âno estás solo, no estás solo, Cuauhtémoc amigo, el pueblo está contigoâ. Contestó: âUstedes âme enseí±aron que la única forma de ganar es con el esfuerzo y la dedicación. Gracias por venir, saben que los quieroâ.
Entre la gente se encontraba, además de Candelario Pérez, el futbolista Germán Villa, su exrepresentante y brazo derecho en el ayuntamiento, José Manuel Sanz Rivera, así como líderes de colonias, comerciantes, transportistas, delegados y ayudantes municipales, empresarios, abogados, presidentes municipales.
Finalmente, el exfutbolista agradeció a la gente âque está conmigo y que me pide que no me rinda. Les pido que vengan conmigo a celebrar este primer aí±o, no les voy a fallar. Voy a seguir luchando por esa gente que ha confiado en mí, que me ha apoyado en estos tiempos difícilesâ.
âMe dicen que soy un ignorante. No sé de derecho, ni de política. Pero sé cómo ayudar a la gente. Yo no creo que la política sea principalmente una cosa técnica. Para hacer política de bien, primero, tienes que ser honrado y tienes que ser auténtico. La gente tiene que poder confiar en tiâ, concluyó.
Sólo cinco de 13 regidores llegaron al primer informe de labores de Cuauhtémoc Blanco. Los demás emitieron un comunicado de prensa para fijar su postura, momentos antes de que arrancara el evento citado a las seis de la tarde de este martes.
Entre sus argumentos para no presentarse a la sesión solemne de Cabildo, los ediles aseguraron: âtenemos conocimiento que asistirán personas y/o grupos de ciudadanos que en días pasados ejercieron actos de violencia y de amenazasâ en contra de ellos, por lo que âno existen condiciones para garantizar nuestra seguridadâ.
Luego de concluir el informe, que estuvo acompaí±ado de un video con los âlogrosâ de la administración en este aí±o, un comediante de Televisa, a quien se conoce como El Costeí±o, ofreció una rutina de stand up.
Las protestas que se esperaban para esta tarde de grupos contrarios a Blanco Bravo, se guardaron para mejor momento.
Por el contrario, al mediodía, un grupo de vecinos de Cuernavaca llegó a la Plaza de Armas encabezados por un hombre con una máscara de Graco Ramírez. Los ciudadanos aseguraron que no apoyan a Cuauhtémoc Blanco, pero tampoco están dispuestos a permitir que se violente la autonomía municipal de la capital. En unas camionetas cargaron bolsas de basura y la dejaron tirada en las puertas del Palacio de Gobierno.