El presidente evitó pronunciarse contra la política estadounidense 'Quédate en México' y reiteró que busca una buena relación.
Por: ForbesÂ
Luego de que la Corte Suprema de Estados Unidos decretó restaurar el programa âQuédate en Méxicoâ (âRemain in Méxicoâ) para evitar que migrantes permanezcan en ese país, el presidente Andrés Manuel López Obrador seí±aló que siempre habrá buena relación con la nación vecina.
âSiempre vamos a procurar tener una muy buena relación con el gobierno de Estados Unidos, se tuvo cuando (estuvo) el presidente (Donald) Trump, y se tiene ahora con el presidente (Joe) Bidenâ, dijo el mandatario.
âSe está atendiendo el problema (migratorio) de fondo, se está buscando que se invierta para que haya desarrollo, que haya empleos, bienestar en los países de Centroamérica, que la gente no se vea obligada a emigrar, porque nadie sale de su casa por gusto, lo hacen por necesidadâ.
En su conferencia âmaí±aneraâ, el titular del Ejecutivo dijo que no se puede resolver un problema social sólo con medidas coercitivas, sino que hay atender la causa, por lo que mencionó que buscan convencer al gobierno de Estados Unidos para que invierta en el desarrollo en Centroamérica y de esta manera las personas tengan opciones para no emigrar.
Recordó que también le propuso al país vecino un programa de visas de trabajo, ya que dijo que se ânecesita la fuerza de trabajo de mexicanos, guatemaltecos, salvadoreí±os, hondureí±os. No hay mano de obra suficiente en Estados Unidos ni en Canadáâ.
López Obrador mencionó que su gobierno lleva una política donde no se rechaza a diestra y siniestra migrantes, sino se ordena el flujo y seí±aló que respalda la postura de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Ayer, el jefe de la Unidad para América del Norte de la SRE, Roberto Velasco, dijo que buscará iniciar un diálogo con el gobierno de Estados Unidos para evaluar los escenarios en gestión de flujos migratorios ordenados, seguros y regulares en la frontera con México.
Además, descartó que el fallo tenga una implicación directa en la gestión migratoria del gobierno mexicano.
âUna decisión judicial de ese tipo no obliga a México y que su política migratoria se diseí±a y ejecuta de manera soberanaâ, dijo Velasco.