A un mes de la grave cornada.
Por FRANCISCO VARGAS M.
Aguascalientes.- El valiente novillero con caballos mexiqueí±o, por adopción aguascalentense Diego Garmendia, comenzó de manera leve y sin esforzarse a entrenar de salón, a un mes de la grave cornada que sufrió el pasado 4 de julio, en la Plaza âSebastián Medinaâ de Monterrey, Nuevo León.
Diego quien continúa con la colostomía, misma que se la retirarán en una nueva intervención quirúrgica, se encuentra con gran actitud y buen ánimo, prueba de ello que tomó capote y muleta, para dar lances y pases al toro imaginario, que es el viento.
A través de un comunicado de prensa, Diego comentó lo que representa este percance para su vida, así como también otros puntos de interés, su sentir sobre su futuro y por supuesto agradecer a todos sus compaí±eros y amigos, que se han preocupado por su salud. El comunicado a la letra dice lo siguiente:
âFue un percance que marcó un antes y un después en mi carrera, la verdad que no me imaginaba tener una cornada de esa magnitud. Muchos se preguntaban ¿qué iba a pasar conmigo? ¿qué si me iba a quitar de los toros? Yo lo que puedo decir es que mentalmente
estoy muy bien. Esto, la verdad, lo agradezco, que haya sido de esta forma, así me doy cuenta que yo quiero esta profesión y quiero seguir en esto, ya que una cornada no me va impedir seguir haciendo lo que amoâ.
âSigo pensando en lo que me gusta, sigo viendo videos de toros. Ahora le dedico también tiempo a mi universidad y, sobre todo, a mi familia, que son los que han estado al lado mío durante todo este proceso. Por último, le agradezco mucho a todos mis amigos, a todos los aficionados que han estado siempre al pendiente de mí, con sus palabras de apoyo y mensajes en redes sociales me han alentado a seguir adelante y a que mi recuperación sea más rápida. Más pronto de lo que esperan yo voy a estar en los ruedos demostrando lo que amo y lo que me gusta hacer. Muchas gracias a todos por tanto carií±o, finalizóâ.
Conociendo la enorme afición y su gran vocación de ser torero, seguro estamos que Diego volverá a vestir el terno de luces, y seguir en busca de todos sus objetivos en esta bella profesión; en la cual siempre se confirma que: âLa grandeza del toreo es la bella creación del arte, en donde se pone en juego la existencia de la vida sobre la muerteâ.
