Una diputada busca hacer legal la portación y uso de espolveadores, gasificadores y dosificadores.
Por: Excélsior
Ciudad de México.- Ante los constantes riesgos que padecen las mujeres en el país, la diputada por el PRI, Miriam Del Sol Merino Cuevas, propuso despenalizar el uso de dispositivos e instrumentos electrónicos para defensa personal.
La legisladora federal presentó una iniciativa de ley que reforma el artículo 160 del Código Penal Federal, para hacer legal la portación y el uso de armas o instrumentos electrónicos, como espolveadores, gasificadores y dosificadores que no superen los 150 gramos, y siempre que su manejo no provoque la pérdida de conocimiento o arriesgue la vida de las personas.
La parlamentaria justifica su iniciativa con base en los altos índices de violencia hacia las mujeres, agresiones físicas y sexuales, discriminación, desigualdad, que obligan a efectuar cambios legales que permitan garantizar su integridad.
Seí±aló que sólo en el estado de Puebla se permite en el Código Penal el uso de gas pimienta y los inmovilizadores como mecanismos de defensa para las mujeres.
âNo es posible que una mujer por defenderse deba de ser detenida y puesta a disposición de las autoridades, cuando lo que estaÌ en riesgo es su vida. Estas deficiencias en nuestra legislación hacen que se cometan más delitos en contra de las mujeres, porque no son capaces de defenderse ni de portar o utilizar algún dispositivo o equipo de defensa personalâ, argumentó.
Mediante un comunicado, la priista enfatizó que âno se trata de portar y utilizar armas de fuego, simplemente se busca brindar las herramientas que puedan inmovilizar o detener temporalmente algún ataqueâ.
Retomó los resultados de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH), la cual reporta que seis de cada 10 mujeres en México han sido víctimas de alguna agresión física y cuatro de cada 10 de alguna agresión sexual.
Advirtió que, el mes de marzo de este aí±o ha sido el más alto en muertes de mujeres, pues de reportaron 359 asesinatos y solamente 92 se consideraron como feminicidios.