
José María âNâ se mostró arrepentido ante el Juez y pidió perdón porque âla cagâ¦, maté a mi morraâ.
Por Grupo Zócalo
Monclova, Coah.- José María âNâ se mostró arrepentido ante el Juez y pidió perdón porque âla cagâ¦, maté a mi morraâ.
En su declaración reconoció haber discutido con su prometida Norma Alicia por unos mensajes que le encontró donde estaba hablando con otro,
"âse levantó para irse al trabajo, pero seguimos peleando, le enredé la extensión de la resistencia, hasta que escuché su último suspiro, luego la metí al bote con agua para hacerla reaccionar pero no despertó, perdón la cag.., tengo que irme de aquíâ.
Ayer se decretó el auto de vinculación a proceso acusado de feminicidio a José María, alias âEl Chemaâ, además se solicitó como medida cautelar la prisión preventiva trasladándolo al Centro de Reinserción Social de Saltillo.
âPerdón, la cag⦠¡maté a mi morra!â
Fue alrededor de las 8 de la maí±ana de ayer cuando âEl Chemaâ compareció nuevamente ante la juez Liliana López de la Cruz, en la sala número 4 del Centro de Justicia Penal de Frontera, luego de haber solicitado una prórroga donde presuntamente aportaría pruebas a su favor, por lo que la próxima audiencia se estima se realice el próximo mes de julio del presente aí±o.
Según con la información del expediente 21/2021JEVF, los hechos ocurrieron el pasado 5 de abril en la Calle 3, número 1600, en la colonia 21 de Marzo de Monclova, cuando en el cuarto de baí±o de la vivienda fue encontrado el cuerpo sin vida de Norma Alicia âNâ quien contaba con 23 aí±os.
Cabe seí±alar que las autoridades mencionaron durante la audiencia que las investigaciones arrojaron que la pareja tenían más de dos aí±os de relación, de la cual procrearon un varoncito cuya edad actual es de un aí±o con ocho meses, según testimonios de familiares, José María y Alicia, tenían tiempo llevándose mal, seí±alando que antes de lo sucedido estuvieron separados por más de un mes luego de que la víctima recibiera una golpiza por parte de su amado.
Pero Alicia amaba mucho a José María, por lo que cuando él le pidió matrimonio, ella aceptó, enamorada y creyendo que todo iba a ser mejor, pero no imaginó que el anillo y las flores era el inicio de su calvario hacia su tumba.
Hizo llamadas
Versiones del propio José María, durante la noche seguían con la pelea, pero fue pasadas las 06:00 horas de aquel 5 de abril, cuando la joven madre de dos pequeí±os se disponía a ir a trabajar, en esos momentos, âEl Chemaâ enojado, cegado por los celos, empezó a insultarla para después continuar con golpes, seguido por tomar una resistencia para calentar agua y con la extensión de la misma ponérsela en el cuello, comenzando a asfixiarla hasta que quedó inconsciente.
En su declaración apuntó que supuestamente intentó reanimarla al sumergirla en un bote de agua sin tener éxito, pero según la necropsia fue precisamente la sumersión que terminó quitándole la vida a Alicia.
Luego de unos momentos, âEl Chemaâ colocó a su víctima en la cama boca abajo, para en su desesperación realizar una llamada a su madre para contarle que había peleado con Alicia, por lo que acudió hasta el domicilio de la pareja para conocer la situación, pero al llegar al lugar, la seí±ora Andrea âNâ, al ver a su nuera inconsciente llamó a la Cruz Roja, quienes no pudieron hacer nada ante el cuerpo inerte de la joven, para después llamar a las autoridades a quienes les dijo que su hijo había matado a su nuera.
Fue entonces que a las 06:59 horas José María se comunicó con su amigo y compaí±ero de trabajo de nombre Raúl âNâ, a quien le pedía verlo con urgencia para hablar con él, ya que le âhabía pegado a su morraâ; horas más tarde luego de haberse encontrado con su amigo, José María, hizo otra llamada al filo de las 10:00 horas, pero en esta ocasión a su ex esposa de nombre Lidia Angélica âNâ, para decirle que le cuidara a sus hijos, diciéndole;
"âtuve que huir de Monclova, estoy en Monterrey porque la cag.., maté a mi morraâ, a lo que su amigo Raúl al escuchar esas palabras le cuestionó; ¿qué onda?, a lo que âEl Chemaâ le respondió; âperdón, pero la cag..., maté a mi morraâ, continuando; âdiscutimos por unos mensajes que le encontré donde estaba hablando con otro, se levantó para arreglarse para irse al trabajo, pero seguimos peleando, le enredé la extensión de la resistencia hasta que escuché su último suspiro, luego la metí al bote con agua para hacerla reaccionar pero no despertó, perdón la cag..., el nií±o estaba dormido, tengo que irme de aquíâ, fueron las primeras declaraciones del imputado.