
Las centrales generadoras de electricidad en Nava mueren poco a poco ante la displicencia de la CFE.
Por Grupo Zócalo
Saltillo, Coah.- Mientras en Guerrero opera a toda su capacidad plantas generadoras a base en carbón importado por el que paga 70% más que por el nacional, la Comisión Federal de Electricidad mantiene en mínimos las dos plantas de Nava, Coahuila, lo que ha paralizado a la Región Carbonífera y pone en riesgo más de 12 mil empleos en la Región Norte, con un impacto negativo por 800 millones de dólares.
En un conflicto que se encamina a terminar en tribunales internacionales, a través de su empresa comercializadora Corporativo Industrial Coahuila, Minera del Norte rechazó la intención de la CFE de variar unilateralmente los términos del contrato de suministro de carbón para las centrales José López Portillo y Carbón II, localizadas en Nava.
La empresa seí±ala que aceptar una reducción de alrededor de 40% en los volúmenes y en los precios del carbón llevaría al cierre de la Unidad Micare, con la pérdida de 4 mil empleos directos y cuando menos 8 mil indirectos de proveedores de bienes y servicios, lo que se sumaría a la paralización que ya registran pequeí±os y medianos mineros.
En carta respuesta a una misiva de Manuel Bartlett Díaz, director de la paraestatal, considera que la propuesta de la CFE representa una violación mayor de lo pactado.
La carta revela que mientras por razones inexplicables se ha reducido a poco más de 20% la operación de las centrales coahuilenses, que se encuentran entre las productoras más eficientes y de menor costo, se ha elevado a casi 100% la generación en la central localizada en Petacalco, Guerrero.
Lo extraí±o, se deduce de la respuesta, es que mientras las generadoras JLP y Carbón II operan con carbón nacional que pagan a 2.76 dólares el millón de unidades energéticas, para Petacalco compran carbón importado a 4.50 dólares.