
La pequeí±a Jade movió por error la enorme olla que contenía agua hirviendo
Por: Rosalío GonzálezÂ
Saltillo.- A Jade en un segundo le cambió la vida, le marcó la piel y le arrebató el hambre y la sonrisa. Apenas tiene 2 aí±os y en la mitad de su cuerpo lleva las huellas de una trágica tarde en la que un descuido la llevó de urgencia al hospital.
Agustín, su papá, vendía elotes durante el fin de semana para llevar el sustento a casa, pero el domingo antepasado esa fuente de trabajo se convirtió en fuente de dolor, pues la pequeí±a Jade movió por error la enorme olla que contenía agua hirviendo. La pequeí±a vestía una blusa que por el calor se le adhirió a la piel, por lo que su padre y tío la rociaron con agua fría. âDicen los doctores que eso evitó que su carne se cocieraâ, comenta Agustín. En una camioneta que el elotero vendió para pagar los medicamentos y material de curación de su hija, Jade fue transportada al Hospital General de Saltillo, donde los médicos decidieron canalizarla al Hospital del Nií±o. Toda la parte frontal de su tronco, cuello, mejilla y brazo izquierdo resultaron afectados por las quemaduras, âmi nií±a berreaba del dolorâ, recuerda la madre, de apenas 19 aí±os. Ahora Jade necesita ayuda, sus padres han acabado con lo poco que tenían: una camioneta y unos cuantos ahorros, y ella sigue con la necesidad de ungí¼entos, medicamentos, gasas y materiales especiales.