
Por fin abre la Puerta Grande de la Plaza âLas Ventasâ de Madrid.
Por: Francisco Vargas M.Aguascalientes.-Â Por fin esa Puerta Grande que tanto se le había negado al diestro murciano Paco Ureí±a, la abrió este sábado 15 de junio, al cortar dos orejas al toro cierra plaza, premios que le dieron las llaves para salir en hombros de la Plaza de âLas Ventasâ de Madrid. Por su parte los matadores, el francés Sebastián Castella y el peruano Andrés Roca Rey, a pesar de estar toda la tarde con gran actitud y entrega, no lograron el triunfo que esperaban.
Con un lleno en el coso venteí±o, se llevó a cabo la Corrida de la Cultura de la Feria de San Isidro 2019; Vigésimo tercer festejo, en el cual con clima caluroso, se jugaron toros de la ganadería de Victoriano del Río, correctos de presentación y comportamiento diferente; destacando entre ellos el sexto, por su clase y buen estilo. Sebastián Castella que vistió de negro y oro lanceó a la verónica de manera aceptable, iniciando su faena de muleta con pases estatuarios por alto ligando muletazos por ambos lados que no llegaron a calar del todo en los tendidos. Pinchazo y estocada para silencio
Las cosas no mejoraron con su segundo, con el que tuvo sus mejores momentos en sus series por el derecho. Estocada caída retirándose nuevamente en silencio.
Paco Ureí±a ataviado de rosa y oro, recibió de manera lucida a la verónica a su primero âJabaleí±oâ, tomando su turno en quites Roca Rey, quien lanceó por vistosas chicuelinas respondiendo Ureí±a de manera artística con el lance fundamental. En lo que toca con muleta, el diestro murciano ante un toro que tuvo nobleza, trazó naturales con gran pureza, siendo prendido de fea manera. Maltrecho y adolorido por la paliza, continuó en la cara del astado sacando más pases por el izquierdo por demás meritorios. Pinchazo y estocada casi entera siendo premiado con una vuelta al ruedo tras petición; pasando enseguida a la enfermería para ser atendido.
Con esa vergí¼enza y valor que le caracteriza, salió de la enfermería para enfrentarse a âEmpanadoâ, sexto del festejo reseí±ado como quinto; al que le ejecutó verónicas lentas y con suavidad; iniciando su gran faena de muleta con pases estatuarios por alto con los pies clavados en la arena, cerrando con trincherillas y el de pecho de pitón a rabo. Con un ambiente cálido como el clima, siguió con estupendos pases por el pitón derecho mismos que tuvieron largueza y profundidad, siguiendo con naturales llevando mano baja, rematando con el de pecho mirando los tendidos; dándose a torear con ese empaque y torería por el derecho. En la suerte suprema, dejó una estocada entera, tardando un poco en doblar su buen colaborador, teniendo petición de las dos orejas, mismas que el presidente le concedió para de esta manera conseguir su primera y tan ansiada Puerta Grande.
Andrés Roca Rey también de negro y oro, al tercero del festejo lo saludó con verónicas, no logrando mucho de lucimiento con muleta al tener un toro con cierto peligro, robándole meritorios pases a base de su firmeza Estocada tras pinchazo para silencio
Al estar Ureí±a en la enfermería, se corrió el turno lidiando el quinto el diestro peruano con el que tampoco tuvo suerte. Estuvo errático con el acero por lo que se retiró otra vez en silencio.
El parte médico de Paco Ureí±a, emitido por el doctor Máximo García Leirado es el siguiente:
"Contusión parrilla costal izquierda con posible fractura y contusión escápula izquierda. Pendiente de estudio radiológico. Pronóstico reservado. Bajo su responsabilidad decide continuar la lidia". Firmado: Doctor. Máximo García Leirado.