Amos Oz falleció ayer a los 79 aí±os
Por: Agencias
Saltillo, Coah.-Â Amos Os nació en Palestina bajo mandato británico y ha muerto el aí±o en que Israel cumple 70, dejando un legado de más de 40 libros y una actividad pacifista materializada, entre otras cosas, en la ONG Shalom Ajshav, de la que fue cofundador.
Hijo de judíos llegados de Europa del Este a Palestina cuando los horrores del Holocausto comenzaban, Oz nació con el apellido Klausner en Jerusalén el 4 de mayo de 1939.
Aquella Jerusalén la describió Oz en su libro Una Historia de Amor y Oscuridad, llevada después al cine por la actriz y directora israelo-estadunidense Natalie Portman.
Oz creció en una familia a la que solía describir en sus entrevistas como âsionista militanteâ, cumplió su servicio militar obligatorio en la brigada Najal, y sirvió en dos guerras como reservista, en la de los Seis días, de 1967, y la de Yom Kipur, de 1973.
Después de la primera, pasó a ser un temprano defensor de la solución de los dos estados, uno israelí y otro palestino.
En una entrevista en 2015, Oz dijo que la paz entre Israel y Palestina âes absolutamente posible, no fácil, pero posibleâ.
âNo pueden simplemente irse de luna de miel juntos, no después de 100 aí±os de violencia, de odio, de injusticia. No pueden convertirse en amantes de la noche a la maí±ana, pero sí pueden llegar a ser vecinos, pueden dividir la casa en dos apartamentos (â¦) Todo lo que necesitamos son unos líderes valientes en ambos lados, pero no los tenemosâ, reflexionó.
El joven Oz comenzó a publicar novelas en 1961, a los 22 aí±os, y uno antes se había casado con Nili Zukerman, con la que tuvo tres hijos.
Entre sus libros más conocidos, traducidos a 45 idiomas, están La Caja Negra, En la Tierra de Israel y Mi Mijal.
Fue galardonado con docenas de premios, entre ellos el Príncipe de Asturias de las Letras, el Frank Kafka o la Medalla Internacional de la Tolerancia, y aunque no ganó el Nobel de Literatura su nombre sonó durante aí±os como candidato.
También publicó cientos de ensayos y artículos de opinión sobre el conflicto israelo-palestino, pero no tocó el tema en sus novelas porque aseguraba que es âuna perdida de tiempo escribir una novela para decir a los rusos que dejen de luchar contra los ucranianosâ.
Y aí±adía: âLo puedes decir en 600 palabras, en un ensayo en El País o en La Vanguardiaâ, pero no en las novelas puesto que âno son un manifiesto políticoâ.
Destino y literatura
Muchas de las historias de Oz tienen como escenario la vida del kibutz -él creció en uno, Hulda, en el centro del país- y exploran la condición humana, las más de las veces a través de las relaciones de sus personajes con el moderno Estado de Israel.
El autor se pronunció públicamente un sinnúmero de ocasiones contra las operaciones militares israelíes en Líbano y Gaza, urgiendo al diálogo y la contención.
Entendía el conflicto del país en el que vivía como âun choque trágico entre dos derechosâ.
Con respecto a la legitimación de Jerusalén como capital israelí por parte del presidente estadunidense, Donald Trump, Oz dijo en una de sus últimas entrevistas en el diario Haaretz que ignoraba cuál sería el futuro de Jerusalén, pero aconsejó:
âTodos los países en el mundo deben seguir el movimiento de Trump y trasladar sus embajadas en Israel a Jerusalén. Al mismo tiempo que cada uno de ellos debe abrir su propia embajada en Jerusalén Este, la capital de los palestinosâ.
Los imprescindibles
Estos son algunos de los libros más destacados del autor:
» Una Historia de Amor y Oscuridad
» La Caja Negra
» Hasta la Muerte
» Mi Querido Mijael
» La Bicicleta Sumji