
El esposo de la mujer también fue capturado y aceptó cargos por tráfico o porte de estupefacientes
Por: Agencias
Colombia.-Â En el barrio Santa Fe, zona de tolerancia de Bogotá (es decir, donde se practica la prostitución legalmente), fue capturada Luz Marina Lozano Parra, quien a través de la Fundación Hijos del Viento, alquilaba nií±os de entre 0 y 8 aí±os que estaban a su cuidado. Tras un aí±o de investigación, la Fiscalía pudo recoger pruebas sobre cómo la mujer prestaba a particulares, por sumas de dinero o donaciones en especie, a hijos de trabajadoras sexuales que los dejaban a su cuidado. Las autoridades documentaron 10 casos. Uno de ellos, el de una nií±a de 3 aí±os que fue abandonada en el hospital Santa Clara con múltiples signos de maltratos y que estuvo a punto de morir. Fue dejada por una pareja a que Lozano les había alquilado a la menor. Asimismo, testigos aseguran que cuando las madres no podían pagar el día de cuidado, retenía a los nií±os. Ello, pese a que Lozano era considerada en el barrio como un 'ángel protector', pues además del servicio de guardería entregaba mercados y otro tipo de ayudas. "Los mercados que entregaban los ciudadanos y que tenían como objetivo mejorar la alimentación de los menores de edad, presuntamente eran utilizados para preparar los almuerzos que se vendían en un restaurante de propiedad de la seí±ora Lozano Parra", aseguró a RCN Radio Mario Gómez, fiscal delegado para la Infancia y la Adolescencia. De hecho, se pudo comprobar que varios bienes que le donaban, como muebles y electrodomésticos, eran vendidos para obtener dinero en efectivo. Además, la Fiscalía conoció el caso de una venezolana que fue explotada laboralmente por ella. La sometía a jornadas de trabajo de más de 20 horas diarias y le confiaba el cuidado de hasta 30 nií±os, a cambio de 11 mil pesos diarios (unos 70 pesos mexicanos). Ahora, Lozano enfrenta cargos por los delitos de trata de personas agravada, tráfico, fabricación o porte de estupefacientes y usurpación de funciones por suplantar la identidad del ICBF en la utilización del llamado "Plan Padrino". El esposo de la mujer, Omar Javier Pacheco, también fue capturado por los hechos y aceptó cargos por tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.