Ahora muere esposa de ladrón acelerado

Fuentes de la PGJE informaron que la mujer, de 20 aí±os, no soportó las fracturas sufridas en todo el cuerpo

Por: Rosendo Zavala

Saltillo, Coah.- El hombre que protagonizó el accidente en el que su bebé murió tras una persecución en la carretera a Zacatecas atraviesa por otra tragedia, luego de que su esposa falleciera tras no soportar las heridas sufridas en el choque. Alrededor de las 13:00 horas de ayer, Liliana Sherline Rodrí­guez Ramí­rez dejó de existir en la sala del hospital donde convalecí­a, debido a las complicaciones fí­sicas que le sobrevinieron a consecuencia del brutal percance. Fuentes de la PGJE informaron que la mujer, de 20 aí±os, no soportó las fracturas sufridas en todo el cuerpo. Seguramente la joven madre se reunirá en el cielo con su pequeí±a Marlene de apenas 9 meses, que falleció mientras era ingresada a un hospital el miércoles. Durante las primeras horas de ayer, la justicia ministerial habí­a determinado otorgar la libertad al jefe de familia y conductor del carro accidentado que se identificó como Juan Carlos Ortiz, debido a que los deudos le acababan de otorgar el perdón por la muerte de la nií±a y los afectados del robo se habí­an dado por reparados. Pero con la muerte de su esposa, la situación jurí­dica se complicó para el jefe de familia que sigue bajo detención, por lo que su panorama podrí­a cambiar con una reclasificación de los hechos. La desgracia de los Ortiz ocurrió la tarde del miércoles en el sur de la ciudad, cuando Juan Carlos abrió un automóvil que estaba parado en el estacionamiento de una tienda comercial y sustrajo 5 mil pesos en efectivo sin saber que los afectados lo estaban viendo. Al verse descubierto, el hombre subió en el Nissan donde lo esperaba su familia y huyó, protagonizando una persecución policiaca sobre la ví­a a Zacatecas que culminó en el área de Derramadero, cuando se impactó contra la base de un puente. Como resultado del encontronazo, su mujer y su hija perdieron la vida, mientras él sigue luchando por defender su libertad y sufriendo por haber perdido a parte de su familia.