
âNo es superstición, sino una tradición lógica y necesaria para equilibrar la naturaleza"
Por: Agencias
Bombay.- Ante la canícula que sacude el norte de India, donde el termómetro alcanza los 47 grados, las autoridades combinan campaí±as de salud públicas con medidas de emergencia para evitar los golpes de calor que el aí±o pasado provocaron más de 200 muertes. Mientras tanto, la población local y algunos políticos recurren a la superstición para conjurar a la lluvia y hacer frente a la inclemencia del tiempo, causante de graves sequías.
Vecinos de la sagrada y turística ciudad de Varanasi, en el estado de Uttar Pradesh, decidieron celebrar una boda especial para honrar a su deidad Indra.
"Queremos que llueva en la ciudad. Es una vieja creencia que el casamiento de ranas hace feliz a Indra. Así que celebramos esta boda para pedirle que nos traiga el monzón", declaró uno de los organizadores a la agencia de noticias ANI.
De no ser por la naturaleza inerte de las partes, esta celebración nada tiene de extraí±o entre algunos de los creyentes hindúes, incluidas personalidades públicas.
La responsable estatal del departamento de mujer y el desarrollo infantil, replicó: âNo es superstición, sino una tradición lógica y necesaria para equilibrar la naturaleza. La sequía es el resultado de un trastorno del entorno. Como el medio ambiente no es feliz con Bundelkhand, estamos tratando de complacer al dios para crear equilibrio. Tiempo atrás, nuestros ancestros solían organizar rituales religiosos en el temploâ, explicó Lalita Yadav, según recoge el medio local Hindustan Times.
No parece que estas tradiciones hayan desaparecido. En 2009, vecinos de un distrito del estado de Jharkhand afectado por continuas sequías también organizaron un matrimonio batracio, con un banquete final al que invitaron a más de 500 personas y para el que incluso alquilaron un coche en el que trasladar 'novio'.
Mientras el sur y el litoral central del subcontinente llevan semanas sumergidos en el monzón, las poblaciones de varios estados centrales ây sus políticosâ se ven afectados por los golpes de calor. Se espera que las lluvias lleguen al centro de India hacia finales junio; dioses y ranas mediante.
Con información de El País